Tregua entre Israel y Hamás se empantana: hay acusaciones de saboteos
Israel acusó a Hamás de no ceder en ningún punto y de usar las negociaciones como herramienta de presión psicológica.
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Las conversaciones indirectas entre Israel y Hamás para lograr un alto el fuego en la Franja de Gaza siguen empantanadas. Aunque ambas partes tienen en mente un acuerdo que permita liberar a diez rehenes y detener temporalmente la ofensiva, las condiciones de cada lado están trabando el avance de un pacto de 60 días que parecía estar cerca.
Desde Doha, donde se adelantan los diálogos con la mediación de Catar, Egipto y Estados Unidos, fuentes palestinas indicaron que el principal punto de discordia es la permanencia de tropas israelíes en territorio gazatí. Según revelaron, Israel insiste en mantenerse en más del 40 % de la Franja, lo que Hamás considera inaceptable.
Un alto funcionario israelí, por su parte, acusó a Hamás de no ceder en ningún punto y de usar las negociaciones como herramienta de presión psicológica. La situación se agrava con las acusaciones mutuas, mientras la violencia en Gaza no da tregua.
Mientras los equipos negociadores discuten, la realidad sobre el terreno es desgarradora. Este sábado, más de 20 palestinos murieron en bombardeos israelíes, entre ellos una familia completa en el campo de desplazados de Deir al Balah. Según la Defensa Civil gazatí, la ofensiva no ha parado y los ataques aéreos se siguen intensificando.
El ejército israelí aseguró haber atacado 250 "objetivos terroristas" en las últimas 48 horas. Sin embargo, los informes sobre víctimas civiles continúan creciendo. Las cifras oficiales indican que desde el 7 de octubre de 2023, han muerto al menos 57.882 palestinos, la mayoría civiles, mientras que del lado israelí fueron 1.219 las víctimas del ataque inicial de Hamás.
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Además, siete agencias de la ONU alertaron sobre una posible catástrofe humanitaria, advirtiendo que la escasez de combustible ya está en niveles críticos. Esta situación podría colapsar los pocos servicios que aún funcionan en Gaza y poner en riesgo a miles de desplazados.
Hamás exige una retirada total de las tropas israelíes de las zonas ocupadas desde marzo, mientras que el primer ministro Benjamin Netanyahu ha reiterado que solo negociará un alto el fuego permanente si el grupo islamista se desarma y renuncia al control de Gaza. Mientras tanto, la guerra y el sufrimiento continúan.