Boyacá y el periodismo se quedan sin Luis Gonzalo Jiménez, ‘El gordito’
Gonzalo estará en la funeraria San Francisco de Tunja a partir de las 6:00 de la mañana y su sepelio será el día domingo a las 2:00 de la tarde en la catedral.
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Luis Gonzalo Jiménez Cuervo, “El Gordito”, como cariñosamente le llamaban quienes fueron afortunados de ser su amigo.
Uno de los más reconocidos y talentosos periodistas del departamento de Boyacá, amable, feliz, tranquilo, siempre se destacó por ser la persona que a todo mundo saludaba, aconsejaba y acogía.
Como profesional un ser intachable, buscando sin descanso la noticia del diario acontecer; para Gonzalo todos los días eran lunes, todos los días había algo que reportar, una historia para contar y alguien para ayudar.
Como amigo, el mejor que se pudiera desear, es quizá una de las pocas personas en este mundo que en verdad logró un millón de amigos y a cada uno de ellos les entregó su corazón.
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Como jefe, un compinche, preocupado por el bienestar de los suyos, nunca se le vio exaltado; la paciencia y la sapiencia eran sus más fuertes virtudes.
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Como esposo, padre e hijo, no tiene calificativo que logre describir el amor que sentía por los suyos, era el centro de gravedad de toda su familia, al lado de él solo había alegría y jocosidad.
El pasado lunes 13 de junio, Gonzalo Jiménez comenzó a sentirse débil, “es una gripa”, le decía a todos, sin embargo, al ocaso del día se vio obligado a asistir a urgencias, esa noche volvió a casa, al lado de su esposa Martha y su pequeña Sara, la luz de sus ojos de tan solo 6 años de edad, pero el dolor y un frío intenso le obligó a volver a la clínica de Cafesalud en Tunja, donde los galenos dieron la orden de ingresarlo de inmediato a la Unidad de Cuidados Intensivos luego de un desmayo.
Fue inducido a un coma mientras se le practicaban varios exámenes para establecer por qué estaba tan mal, las horas pasaban y Gonzalo no daba muestras de recuperación.
Este viernes en horas de la mañana, cuando la familia buscaba la forma de trasladarlo a Bogotá, Gonzalo empeoró y sobre el medio día los médicos reportaban la nefasta noticia: había fallecido.
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Gonzalo Jiménez Cuervo, que Dios y la Virgen te protejan.
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Descansa en Paz.