El “enredo” que hoy tiene en duda la aprobación de la reforma pensional en la Corte Constitucional

Sigue siendo incierto el futuro de la reforma pensional, uno de los proyectos “bandera” del Gobierno nacional, cuya entrada en funcionamiento estaba prevista para el pasado primero de julio pero que fue suspendida por orden de la Corte Constitucional el pasado 17 de junio, a la espera de que la Cámara de Representantes corrija un error en el trámite de la ley.La incertidumbre sobre si la reforma pensional se hunde o no, ha sido utilizado de nuevo por el presidente Gustavo Petro como insumo para atacar al presidente de la Corte, Jorge Enrique Ibáñez, a quien acusó de liderar una estrategia para que se declare inexequible la reforma, supuestamente “quemando unos días” para que se posesione el magistrado Héctor Carvajal, quien fue el abogado del jefe de Estado y quien tendría que declararse impedido para decidir sobre ese asunto.El magistrado Jorge Enrique Ibáñez le respondió de inmediato al presidente Gustavo Petro por medio de un comunicado, desmintiendo que él esté detrás de una estrategia para hundir la reforma y revelando que el auto de la Corte que ordenó devolver a la Cámara el proyecto, “no se ha podido terminar de firmar” y por lo tanto será llevado a la próxima Sala Plena que se realizará el miércoles 23 de julio.Ibáñez también reveló que a pesar de que la plenaria de la Cámara de Representantes supuestamente subsanó el error de trámite de la reforma pensional el pasado 28 de junio, hasta la noche del viernes 11 de julio, es decir, 13 días después, esa corporación no había remitido a la Corte Constitucional, el informe de lo aprobado para su revisión.En este punto se enreda el asunto: primero, Blu Radio reveló que tres magistrados de la Corte Constitucional, Vladimir Fernández, exsecretario Jurídico de la Presidencia de Gustavo Petro, Natalia Angel Cabo y Miguel Efraín Polo, se han negado a firmar el auto que devolvió a la Cámara el proyecto de reforma pensional para subsanar su trámite, argumentando que ese documento no dice lo que fue discutido y aprobado por esa corporación el pasado 17 de junio. Esa situación ha imposibilitado la opción de que la Corte remita a la Cámara la decisión detallada sobre la reforma pensional.Ahí viene el segundo enredo: el Gobierno convocó a sesiones extras a la Cámara para acelerar la corrección del trámite de la reforma pensional, con base en el comunicado de prensa emitido por la Corte, sin esperar la expedición oficial del auto que es el documento en el que se deben explicar de manera detallada las órdenes dadas por los magistrados a los congresistas para subsanar los errores producidos.Esa situación puede poner en riesgo el futuro de la reforma pensional porque el próximo 23 de julio, los nueve magistrados de la Corte tendrán que estudiar si lo aprobado por la Cámara el pasado 28 de junio sí corrige o no, los errores de trámite que encontró ese alto tribunal, solamente con base en el comunicado, sin conocer el documento completo de la Corte.