Más de 300 soldados con entrenamiento especializado, acompañados por un componente de la Policía, desembarcaron en inmediaciones de los corregimientos de Huisitó y San Juan de Micay, en el municipio de El Tambo, Cauca. Estos sectores son considerados retaguardia estratégica de la estructura criminal ‘Carlos Patiño’ de las disidencias de las Farc, uno de los grupos armados más activos y peligrosos en la región.
La operación, denominada ‘Perseo II’, busca reforzar la seguridad, consolidar el control territorial y neutralizar la amenaza que esta organización representa para las comunidades rurales del Cauca.
El despliegue militar se ejecuta con apoyo aéreo y terrestre. Helicópteros UH-60 Black Hawk realizan inserciones y movimientos tácticos; vehículos blindados avanzan en corredores viales clave; aeronaves no tripuladas y artillería complementan las maniobras ofensivas que llevan a cabo las tropas en tierra. El objetivo es golpear las capacidades logísticas y de movilidad de la estructura, al tiempo que se protege a la población civil.
Según el Ejército, la estrategia contempla no solo acciones de combate, sino también la estabilización de la región, para que las comunidades puedan acceder a programas sociales y económicos sin la presión de actores armados.
De manera conjunta con la Fuerza Aérea Colombiana y en coordinación con la Policía Nacional, las operaciones se mantienen de forma sostenida con el propósito de debilitar las redes criminales que afectan la tranquilidad de los habitantes del Cauca.