Después de un fin de semana en el que la Vía al Llano reabrió al tránsito, pero volvió a presentar agrietamientos en el kilómetro 18, el Instituto Nacional de Vías (Invías) confirmó que los trabajos en curso no corresponden a una solución definitiva, sino a labores de mitigación que buscan mantener la movilidad mientras se estabiliza el terreno, pues este todavía es inestable.
Con una inversión inicial que supera los 10.000 millones de pesos, estas intervenciones se concentran en bacheos, drenajes y control de aguas, acciones necesarias para evitar nuevos derrumbes.
“Estamos trabajando sobre una masa que no es estable. Sabíamos que podían aparecer grietas. Por eso avanzamos en bacheos para mantener la transitabilidad y pedimos a los usuarios acatar las medidas de seguridad vial del sector”, aseguró el director general encargado de Invías, Jhon Jairo González.
Las lluvias de la temporada han complicado la operación, puesto que incrementan la infiltración de agua y la presión sobre el talud, lo que puede generar nuevos levantamientos del pavimento o derrumbes. Por ello, se adelantan obras de drenaje superficial, instalación de cunetas y sistemas horizontales que actualmente evacúan el agua del subsuelo.
Además, para atender la emergencia, Ecopetrol suministrará una tubería especial para intervenir directamente la superficie de la falla. Su instalación busca liberar presiones en la parte alta del talud, reduciendo el riesgo de nuevos movimientos que afecten el trazado vial.
“La instalación de esta tubería permite que nosotros podamos mitigar el riesgo, quitándole el esfuerzo al talud que está haciendo presión sobre el terreno. Entonces, capta la superficie de falla y evita presiones del talud en la parte alta, de lo contrario podría registrarse otro derrumbe o levantamiento del pavimento de la vía”, aseguró el director general de Invías.
El concesionario continúa adelantando estudios y diseños definitivos para dejar una solución a largo plazo. El Ministerio de Hacienda confirmó recursos por cerca de 100.000 millones de pesos para 2026, destinados exclusivamente a ejecutar obras de estabilización definitiva en este tramo de la Vía al Llano en el kilómetro 18.
Invías insiste en que, pese a las grietas y los trabajos en curso, hay transitabilidad en el km 18, y se mantendrá mientras las condiciones lo permitan, mencionando que “con los recursos que tenemos queremos cumplirles a todas las personas que transitan esta vía. Seguiremos trabajando para garantizar la movilidad, pero es vital respetar la señalización y las recomendaciones de seguridad”.
Sin embargo, la entidad advierte que podrían presentarse nuevas afectaciones, especialmente si aumentan las lluvias o la presión del talud continúa impactando el pavimento.