"Siempre que sale un colega no es bueno. Para cualquiera de los entrenadores que nos toca dirigir sabemos que es una situación que duele, que cuesta, y que hay que aceptar, porque es parte de este juego, así que siempre desearle lo mejor a cualquier entrenador que entre y toda la fuerza a los entrenadores que desgraciadamente, porque el fútbol es así, tienen que salir", declaró Simeone. (Vea acá también: Cinco razones del fracaso de Rafael Benítez en el Real Madrid).
Para él, que acumula ya cuatro años en el banquillo del Atlético de Madrid, es "claro y muy importante sostener la estabilidad en todo trabajo". "Y en el nuestro más todavía, porque es una consecuencia de entrenamientos, de partidos, de continuidad y en algunas situaciones se puede reflejar, en otras es más difícil. Cada uno tiene su forma de trabajo y de encarar situaciones", explicó. (Lea acá también: Zidane, una leyenda pero una incógnita como técnico, ahora en el Real Madrid).
"Está claro que cuando un entrenador sale no es bueno. Seguro que no es bueno. Y duele, porque en lugar de él podemos estar cualquiera de nosotros que está trabajando. Benítez es un gran entrenador, con una historia enorme y le deseamos lo mejor", añadió.