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Las palabras: hay unas que tienden puentes y otras que dinamitan cualquier relación

Las hay universales, que nos permiten juntarnos como humanidad, pero también las particulares que nos hacen creer en nuestros valores particulares.

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Alberto Linero
Foto: Alberto Linero

Las palabras nos definen. Lo que somos se expresa en las palabras que pronunciamos. Hay unas que tienden puentes y otras que dinamitan cualquier relación. Algunas acarician el alma y otras, cuál daga afilada, hieren y destruyen el corazón. Las hay universales, que nos permiten juntarnos como humanidad, pero también las particulares que nos hacen creer en nuestros valores particulares.

Por eso me alegré al leer ayer sobre el proyecto del Instituto Caro y Cuervo, que con el apoyo de la Academia Colombiana de la Lengua y el Ministerio de Cultura, se unieron para crear un diccionario de colombianismos, el cual hoy tiene 6.000 entradas, 1.500 expresiones, 8.000 definiciones y 4.500 ejemplos. Palabras tan hermosas como “sumercé” que escuchamos mucho en el interior; o el famoso “corrientazo” que no tiene que ver nada con la electricidad, sino con el almuerzo; o “la totuma” en donde nos tomamos los deliciosos sancochos… entre muchas otras que describen lo que somos.

Creo que este tipo de investigaciones cumplen tres funciones importantes para conservar nuestra forma de ser:

1. Guardar esas palabras que nos definen, como un tesoro cultural. Muchos de mis amigos que están en el exterior se expresan con ellas solo cuando pueden hablar con sus coterráneos, y eso les hace crear una gran identidad. Creo que tener esas palabras en nuestro uso diario nos permite recordar lo valioso de nuestras tradiciones.

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2. Ser conscientes de la dinámica de la lengua. Constantemente van muriendo palabras y apareciendo muchas otras nuevas. Lo que implica una actitud flexible a la condición humana, entender que la transformacióny el cambio hacen parte de la vida.

3. Cuidar el lenguaje. Aprendiendo los conceptos y los usos de los mismos, y aplicándolos con naturalidad en nuestra cotidianidad. No es cierto que todas las palabras estén inventadas, pero sí es cierto que aquellas que nos identifican merecen ser tratadas con cuidado.

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Yo soy un caribeque usa constantemente palabras que lo identifican, y aunque muchos puedan criticar eso, yo creo que es la mejor manera de llevar mi esencia en el mundo. Las palabras crean realidades, eso es necesario comprenderlo.

Escuche aquí a Alberto Linero:

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