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Desde granadas hasta prótesis de cadera encuentran cazatesoros en embalse de Guatapé, Antioquia

Luego de encontrar los diferentes elementos, los cazatesoros utilizan las redes sociales para buscar a los dueños y devolverlos.

TESOROS GUATAPÈ - EMBALSE.jpg
Tesoros encontrados en el embalse de Guatapé, Antioquia.
Foto: Club Cazatesoros

Desde granadas hasta prótesis de cadera se ha encontrado un grupo de cazatesoros en las zonas secas del embalse de Guatapé, municipio del Oriente antioqueño.

Los históricos bajos niveles que en los últimos días ha registrado el embalse de Guatapé en el oriente de Antioquia, aunque han generado preocupación para muchos por la generación de energía, para otros ha sido una oportunidad para desenterrar objetos que se han extraviado en ese lugar.

Ya sea recorriendo este afluente en jet ski, en barcos de turismo o incluso nadando, anillos, cadenas, amarres de brujería, relojes, gafas, celulares, monedas y pulseras, han sido varios de los elementos con los que se han cruzado un grupo de 30 personas que tienen como hobby buscar objetos pérdidos.

Tienen un club llamado Detectoristas de Antioquia y ubicados en zonas estratégicas de la represa, como abajo de algunos de los puentes que la cruzan, han hallado, según Robert Herrera, integrante del grupo, cosas tan extrañas como una granada, proveedores de pistola y hasta una prótesis de cadera de una persona fallecida.

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"Me dijo, ve a mi mamá se murió y ella antes de morirme decía que su último deseo era que le tirara las cenizas al embalse de Guatapé, y ella tenía dos implantes de cadera uno de rodilla y uno de rodilla y yo lo tiré por este puente en tal parte y preciso fue la ubicación por donde nosotros lo encontramos”, relató.

Consigo solo llevan un detector de metales grande, otro pequeño, una pala para desenterrar y una mochila para meter tanto los objetos que encuentran como la basura que contamina este tipo de ecosistemas.

Herrera asegura que es una labor satisfactoria no solo por el gusto de encontrar cosas pérdidas, sino cuando encuentran gratitud en los dueños de esos objetos que después de muchos años o incluso décadas ya creían totalmente perdidos.

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“Uno sabe que son cosas que se perdieron en la tierra y que cuántos años llevarían ahí, entonces a uno lo llena mucho y es una labor que para nosotros también es, algo emocional, algo que nos alegra la vida”, agregó.

A través de redes sociales, constantemente este grupo de personas publican todo lo que hallan en sus salidas con el objetivo de que aquellos que crean haber encontrado lo que en algún momento extraviaron los contacten y así puedan recuperar elementos de un gran valor, más que económico, sentimental.

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