Una banda de delincuentes estaría utilizando plataformas digitales de arriendo temporal para ejecutar robos en lujosos apartamentos de Bucaramanga, según confirmó la Policía Metropolitana. En tan solo una semana se han registrado al menos cuatro hurtos en un mismo edificio ubicado en el sector de Mejoras Públicas.
La modalidad utilizada por los criminales consiste en arrendar apartamentos por uno o dos días a través de reconocidas plataformas de alojamiento, para luego estudiar los movimientos dentro del edificio y ejecutar los robos sin levantar sospechas.
La investigación, liderada por el Grupo Contra Atracos de la Sijin, apunta a que los delincuentes aprovecharon puntos ciegos en las cámaras de seguridad y accedieron a los inmuebles a través de ventanas que comunican con los pasillos internos.
“En solo uno de los casos hubo forzamiento de la chapa. En los demás, ingresaron de forma sigilosa por las ventanas, buscando objetos de valor que pudieran sacar fácilmente, como joyas, dinero y dispositivos electrónicos”, explicó uno de los investigadores del caso.
El general Henry Bello, comandante de la Policía Metropolitana de Bucaramanga, señaló que ya se adelantan reuniones con las víctimas y la administración del edificio para recoger pruebas y avanzar en la identificación de los responsables. También hizo un llamado a la ciudadanía para extremar las medidas de seguridad al momento de alquilar sus inmuebles por cortos periodos.
“Les pedimos a los propietarios que verifiquen con quién están haciendo los acuerdos. No basta con una llamada o un mensaje de texto. Es necesario pedir la cédula, revisar los perfiles de quienes arriendan, asegurarse de que la información sea verificable. Estamos hablando de personas que, a través de plataformas digitales, están entregando sus propiedades sin conocer quiénes las ocuparán”, declaró el oficial.
Las autoridades ya trabajan de manera articulada con la vigilancia privada, los administradores del conjunto residencial y el personal de seguridad interna para fortalecer los controles. La Policía no descarta que se trate de una red organizada que podría estar operando en otras ciudades del país bajo el mismo método.