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Dormir bien no solo mejora el estado de ánimo, también es clave para la salud física y mental.
Sin embargo, cada vez más personas sufren trastornos del sueño, desde insomnio hasta despertares frecuentes durante la noche, y muchas recurren a suplementos de melatonina sin saber que la solución podría estar en la cocina.
Aunque la glándula pineal del cerebro produce melatonina de forma natural, existen alimentos que también la contienen en pequeñas cantidades. Y entre todos ellos, hay una fruta que sobresale por su alto contenido: las cerezas.
Las cerezas, especialmente las variedades oscuras como las cerezas ácidas o negras, contienen melatonina de forma natural. Esta sustancia regula el ciclo sueño-vigilia y prepara al cuerpo para el descanso nocturno.
Además, aportan antocianinas, unos potentes antioxidantes que también ayudan a aumentar los niveles de melatonina en el organismo.
Un estudio del Journal of Experimental Botany reveló que las cerezas contienen niveles mucho más altos de melatonina que otros alimentos comunes.
Otra investigación de la Universidad de Rochester encontró que adultos mayores que tomaron jugo de cereza ácida durmieron hasta una hora y media más por noche.
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El European Journal of Nutrition publicó que el consumo habitual de cerezas mejora la eficiencia del sueño y reduce los despertares nocturnos.
Las cerezas pueden comerse frescas, en jugo o como parte de un suplemento. Lo importante es incluirlas en una dieta equilibrada y saludable.
Para mejores resultados, los expertos recomiendan:
Incorporar cerezas a la dieta podría ser un paso natural, sabroso y efectivo para quienes buscan mejorar su descanso sin depender de fármacos. Siempre es recomendable consultar con un profesional de la salud antes de realizar cambios en la dieta, especialmente si se sufre de trastornos crónicos del sueño.
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