Joven es condenada a 10 años de prisión por un estado de WhatsApp: esto fue lo que publicó
Una joven fue sentenciada a 10 años de prisión tras publicar un estado en WhatsApp. Le escribió una desgarradora carta a sus papás desde la cárcel.
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Un mensaje publicado en el estado de WhatsApp le costó la libertad a Merlys Oropeza, una joven de Venezuela que fue sentenciada a diez años de prisión bajo cargos de incitación al odio.
La condena, dictada el pasado 18 de junio, ha generado indignación entre organizaciones defensoras de derechos humanos que denuncian el uso excesivo de la legislación para reprimir la libertad de expresión.
Merlys, de 24 años, fue arrestada el 9 de agosto de 2024, tan solo once días después de las elecciones presidenciales en las que el opositor Edmundo González fue inicialmente reconocido como ganador. Sin embargo, el oficialismo declaró su victoria por un estrecho margen, lo que desató denuncias de fraude electoral.
En medio de ese clima de tensión política, la joven publicó en su estado de WhatsApp un mensaje crítico dirigido a una líder del Consejo Comunal y jefa del CLAP (Comité Local de Abastecimiento y Producción) de su barrio: "Estas son las palabras de la jefe del CLAP de Las Carolinas, calle 4. Qué triste ver a personas que prefieren la bolsa de gorgojos al futuro de sus hijos".
Dicho comentario, que reflejaba su descontento frente a la situación política y social del país, fue considerado un delito por las autoridades, quienes la acusaron de incitar al odio.
Desde su celda, Merlys escribió una carta desgarradora a sus padres. A mano, en una hoja, expresó el dolor que le ha causado su encarcelamiento y pidió perdón por lo que considera “una pesadilla” para su familia.
"Estoy aquí en un lugar oscuro, encerrada no solo en cuatro paredes, sino por el peso de mi culpa y mi tristeza", dice uno de los fragmentos. En la misiva también confesó sentirse emocionalmente destruida y sin fuerzas para seguir adelante.
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Organismos de derechos humanos han manifestado su preocupación ante este caso, señalando que representa un grave precedente de criminalización del pensamiento crítico en redes sociales. Para muchos, el castigo impuesto a Merlys Oropeza por una publicación personal en una aplicación de mensajería es una muestra del creciente autoritarismo y la represión que atraviesa el país.