Policía ordenó a reclusos hacer un asado y ser meseros en una boda fuera de la cárcel

Hay noticias que superan la ficción y, esta vez, en Argentina se presentó un insólito hecho por parte de un comisario de Policía de la provincia de La Pampa que se excedió en su cargo para dar unas extrañas órdenes a unos reclusos.De acuerdo con el medio TN Noticias, el jefe de la subcomisaría de Lonquimay, oficial inspector Cristian Martín Galván, realizó una boda y decidió ordenar a seis reclusos que realizaran un asado para sus invitados al matrimonio y, al mismo tiempo, que fueran los meseros del evento.Según este medio argentino, la boda se realizó a unos cuantos metros de la subcomisaría, por lo que los privados de la libertad tuvieron que salir de donde estaban recluidos y, aparentemente, lo realizaron sin ningún tipo de custodia por parte de la Policía local.Lo más curioso de lo sucedido es que los reclusos también tuvieron que limpiar el lugar luego de la fiesta de matrimonio que se realizó y, después, por sus propios medios, regresaron a sus celdas, nuevamente sin ningún tipo de supervisión por parte de alguna autoridad.¿Qué pasó con el oficial?Después de conocerse esta polémica, que habría sucedido el 31 de mayo del 2024, inició un proceso judicial contra el oficial por incumplimiento de sus funciones como funcionario público.Además, se investiga si hubo malversación de fondos públicos para este evento que era de carácter privado y, de igual manera, posibles violaciones a los derechos de los seis detenidos.En el proceso judicial que se adelanta hay como testigos dos policías de la subcomisaría y también se escuchará el testimonio de algunos reclusos que estuvieron en el salón donde se realizó la fiesta del matrimonio.En los próximos días se conocerá la sentencia contra este oficial, que podría recibir una condena entre un mes y dos años de prisión, al igual que hasta cuatro años de inhabilidad para ocupar cargos públicos en Argentina.