“Reconocer la máscara”: una exhibición contemporánea sobre identidad y metamorfosis
El proyecto sostiene que la máscara es un territorio donde coexisten “dos fuerzas opuestas: la del disfraz y la del descubrimiento”.
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La exposición “Reconocer la máscara”, curada por Angelina Guerrero, propone un análisis profundo y sensorial sobre la identidad en tiempos marcados por la tecnología y la vigilancia. Desde una perspectiva que combina lo poético, lo político y lo ritual, la muestra parte de la idea de que “reconocer es como un espejo que se lee en dos direcciones”, estableciendo así la noción de doble mirada que atraviesa todo el proyecto. En este juego de opuestos, lo que se revela y se oculta, lo que se protege y se expone la máscara emerge como dispositivo central para entender la pluralidad contemporánea.
El proyecto sostiene que la máscara es un territorio donde coexisten “dos fuerzas opuestas: la del disfraz y la del descubrimiento”. Esta tensión invita a cuestionar la relación entre apariencia e identidad, especialmente en una era saturada de imágenes, algoritmos y sistemas de reconocimiento facial. En este contexto, la exposición se pregunta: “¿Qué ocurre cuando decidimos no ser reconocibles?” La respuesta se despliega a través de obras que sugieren que cubrirse puede ser una forma de resistencia ante la hiperexposición digital, una manera de evadir la clasificación y reivindicar la multiplicidad del ser.
Las piezas exhibidas también recuperan la dimensión ancestral y simbólica de la máscara. Según el texto curatorial, “las máscaras poseen la capacidad de elevar el objeto a la dignidad de la cosa, devolviéndole su sentido original de contener vida, memoria y espíritu”. Esta idea se refleja en el uso de materiales como madera, cerámica, vidrio, tierra, cera o fique, que evocan prácticas rituales y vínculos con la naturaleza. Al mismo tiempo, la muestra subraya la pregunta contemporánea “Are we robots?”, incorporando un diálogo entre lo humano y lo artificial que atraviesa la propuesta.
El conjunto de artistas participantes, Camilo Pachón, Daniel Jiménez, Danielle Kovalski Monsonego, María Roldán Ruíz, Mateo López, Miguel Cárdenas, Nor@ Renaud, Rosana Escobar, Salvador Jiménez-Flóres y Santiago Lemus, presenta obras que funcionan como “fragmentos de posibles rostros”. Cada pieza actúa como una superficie de identidad superpuesta, una epidermis simbólica que remite tanto a los orígenes míticos de la máscara como a su vigencia en la cultura visual actual. La muestra destaca que estas formas pueden remitir a “cuernos, plumas, antenas, pelos, colmillos”, señales de una genealogía que enlaza lo animal, lo humano y lo espiritual.
La exposición también incorpora experiencias performativas. Se anuncian encuentros de danza y ritual que buscan recordar que “la máscara no es un objeto inmóvil sino un gesto que respira”. En estos espacios, la metamorfosis se convierte en acción, reforzando la noción de que “reconocer la máscara es aceptar que detrás del rostro hay muchos otros”.
“Reconocer la máscara” se encuentra abierta al público en Espacio KB, ubicado en la Calle 74 # 22-20, en Bogotá. La muestra estará disponible entre el 1 de noviembre y el 5 de diciembre de 2025, permitiendo a los visitantes acercarse a esta reflexión sobre lo visible, lo oculto y las nuevas identidades que emergen en un mundo híbrido entre lo ritual y lo tecnológico.