Actualizado: 18 de dic, 2016
Publicidad
Publicidad
Publicidad
Publicidad
“En ocasiones vemos a José y María como seres de otro mundo, pero son normales como nosotros que tenían que comprender momentos difíciles (…) Este tiempo de adviento nos permite a todos acoger a María como madre en nuestro corazón y a Jesús como fruto vendito de su vientre”, afirmó.