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El coronel Daniel Gutiérrez, director del Inpec, respondió al pronunciamiento que hizo el alcalde de Barranquilla, Jaime Pumarejo, sobre los extorsionistas que desde las cárceles tienen en jaque a los establecimientos de comercio, incluidas a las estaciones de gasolina, y aseguró que tienen los ojos puestos sobre seis reclusos, que están siendo aislados para evitar que sigan generando inseguridad en la ciudad y su área metropolitana.
"Lo que pasó en Barranquilla lo estamos controlando. Estamos efectuando requisas y aislamientos. Ya tenemos una caracterización del fenómeno, ya sabemos cómo funciona, así que estamos haciendo la identificación de todos estos delincuentes que todavía están afectando la seguridad", dijo el oficial.
El personero de Barranquilla, Miguel Alzate, aseguró que la problemática de hacinamiento en las cárceles favorece el accionar de los delincuentes desde estos centros penitenciarios, ya que se dificulta cada vez más ejercer el control sobre los reclusos y, además, impide su proceso de resocialización.
Pidió al Inpec y a la Uspec asumir su responsabilidad en el manejo de estas cárceles y reparar los sistemas instalados para bloquear las señales de celular, pues estos dejaron de funcionar hace tres años y los delincuentes siguen haciendo llamadas extorsivas desde prisión.
"Yo creo que el camino no es salir a buscar responsables, sino soluciones y de manera urgente debería hacerse una intervención sobre estos implementos técnicos para que entren en funcionamiento de inmediato", pidió el personero.
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