Nos cogió el apagón: Editorial Heberto Amor
El director de Blu Radio Barranquilla hablá sobre las medidas que tomará la empresa Electricaribe en barrios subnormales de la ciudad.
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Lo inevitable llegó. La empresa Electricaribe anunció oficialmente que a partir del primero de mayo serán sometidos a cortes de energía de siete horas diarias los sectores subnormales ubicados en todos los departamentos de la Costa Atlántica, en los que los altos consumos y la falta de cumplimiento en el pago han obligado a concertar un programa que denominan limitación de suministro.
El gerente comercial de Electricaribe, José Rodrigo Dajud, quien tiene a su cargo el tema, afirma que la deuda actual de los barrios subnormales en los departamentos de la Región Caribe supera los 620 mil millones de pesos.
Estos cortes de energía cobijan a grupos de 12.500 familias y se aplicarán de 8 de la mañana a 3 de la tarde en periodos de 15 días, luego de los cuales se hace la evaluación para determinar los comportamientos de pago y consumo.
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Según el funcionario esto ha sido concertado con las comunidades que entienden que es necesario buscar una solución a la crisis. Es por eso que el barrio tomado como modelo para iniciar el proceso es el barrio Los Olivos en el occidente de Barranquilla.
Llama la atención que quienes iniciaron las protestas e instalaron carpas frente a las oficinas de Electricaribe para presionar la intervención, no aportan ahora soluciones legales que impidan los cortes de energía.
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No se trata de un problema de suministro, se trata de un problema de connotación legal y social. Soledad es el primer municipio en el que la administración está acordando con Electricaribe la posibilidad de entrar a mediar en el problema para minimizar el impacto en las comunidades.
Ahora que oficialmente se anuncia el apagón gradual y selectivo van a surgir situaciones sociales y hechos que ojalá no afecten el orden público.
La energía que se distribuye a esos sectores subnormales equivale a 80 gigavatios hora día, que representan el 10% del total de la energía que adquiere Eletricaribe y que paga a los generadores, quienes a pesar de tener en este momento a full los embalses siguen manejando precios altos.
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Los alcaldes, gobernadores y políticos deben proponer soluciones que eviten el apagón antes de la llegada de un nuevo operador.
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Las empresas que han mostrado interés en reemplazar a Electricaribe no quieren cubrir esas zonas consideradas el hueso.
Los empresarios interesados en el negocio sólo quieren la pulpa. ¡Otra vez, nos cogió el apagón!