En la habitación del apartamento en el centro de Bucaramanga donde vivía Laury Yisel Guzmán Becerra, fue hallado el cuerpo sin vida de la joven de 21 años quien hace unos meses había llegado a la capital santandereana en busca de trabajo.
En el lugar de los hechos la Unidad Móvil de Criminalística realizó la inspección técnica del cadáver.
“De acuerdo con lo que se conoce preliminarmente, la víctima no presenta lesiones o heridas en su cuerpo, de igual forma, se avanza en la investigación correspondiente a través de las cámaras de monitoreo y versiones de posibles testigos”, confirmó el coronel Juan Andrés Guzmán, subcomandante de la Policía Metropolitana de Bucaramanga.
Las autoridades, igualmente, tratan de ubicar al novio de Laury, su jefe, quien no ha vuelto al trabajo y tampoco ha contestado llamadas, según denunciaron familiares de la joven.
Se conoció que el domingo 25 de junio la joven salió a un establecimiento nocturno y fue la última vez que la vieron con vida.
El cuerpo de Guzmán Becerra permanece en la sede de Medicina Legal de Bucaramanga donde se espera el dictamen para establecer las causas de su muerte.