La jueza Sandra Heredia, quien lidera el juicio contra el expresidente Álvaro Uribe Vélez, concluyó que las interceptaciones telefónicas practicadas por la Corte Suprema de Justicia fueron legales y ajustadas a derecho. En su análisis, descartó irregularidades o actos de mala fe en el procedimiento.
“La orden emitida el 7 de marzo cumple con las exigencias legales, máxime que dicha decisión fue debidamente fundamentada por escrito y ejecutada dentro de las 24 horas siguientes a su recepción”, sostuvo Heredia, refiriéndose al procedimiento que permitió interceptar los números asociados a los presuntos hechos delictivos.
Fue precisamente en el marco de esas interceptaciones, dirigidas inicialmente al entonces congresista Nilton Córdoba, que la Corte Suprema terminó escuchando conversaciones del expresidente Uribe con su abogado Diego Cadena. En esas llamadas, según el expediente, hablaban sobre presuntos planes para lograr la retracción de exparamilitares presos que habían vinculado a Álvaro y Santiago Uribe con las Autodefensas Unidas de Colombia (AUC).
La jueza aclaró que, aunque los números no estuvieran registrados a nombre de Uribe, había “indicios razonables” de que estaban siendo utilizados para planear, ejecutar u ocultar la comisión del delito. Por eso, señaló, las diligencias cumplían con los requisitos jurídicos.
Asimismo, rechazó las acusaciones de la defensa del exmandatario, que ha denunciado desde el inicio del caso una supuesta manipulación del proceso para interceptarlo. “No puede afirmarse que haya existido una actuación de mala fe o una irregularidad intencional concertada con el propósito de interceptar al señor Uribe Vélez”, agregó Heredia, y precisó que tales señalamientos se basan en conjeturas sin respaldo probatorio.