La Embajada de China en Colombia expresó este lunes 28 de julio su “fuerte insatisfacción y firme oposición” a unas declaraciones del encargado de negocios de la Embajada de Estados Unidos en Colombia, John McNamara, por considerar que “distorsionó y denigró” la política diplomática de China hacia América Latina y las relaciones chino-colombianas.
Según un comunicado de la misión diplomática del gigante asiático, McNamara “hizo vista gorda a los hechos básicos” al referirse a las diferencias entre la relación comercial de Colombia con Estados Unidos y la que mantiene con China.
La reacción se produjo luego de una entrevista concedida por el encargado de negocios de la Embajada de Estados Unidos en Bogotá, John McNamara, al diario El Tiempo, en la que afirmó: “Cuando veo la panorámica de las dos relaciones bilaterales, hay que mencionar que el nuestro es un comercio binacional de valor agregado y de valores democráticos compartidos. Es un aspecto importante que no todos los países, incluido ese país de Asia, tienen”.
En esa misma declaración, McNamara agregó: “Tenemos dos sistemas de gobierno: Colombia y Estados Unidos somos parte del mundo libre, donde el pueblo manda por medio de sus votos y elige a sus representantes. Y están esos países, China en particular, que tienen la idea de que el pueblo trabaja para el gobierno, o tal vez para un solo partido, o para un solo cacique”.
En medio de las tensiones comerciales y la guerra arancelaria iniciada por el gobierno de Donald Trump —que impuso aranceles que llegaron hasta el 145 % al gobierno de Xi Jinping—, la embajada señaló que, aunque McNamara sostiene que la relación económica y comercial entre Estados Unidos y Colombia es “mutuamente beneficiosa”, en realidad el país norteamericano “persigue sin escrúpulos su ‘America First’, golpeando con el garrote arancelario a todo el mundo, incluida Colombia, e interfiriendo a su antojo en los asuntos internos, judiciales y migratorios de otros países, a través de abiertas amenazas y chantajes”.
La misión diplomática señaló también que Estados Unidos “rompió arbitrariamente el TLC con Colombia”: “La parte estadounidense rompió arbitrariamente el Acuerdo de Promoción Comercial entre Colombia y EE. UU., imponiendo aranceles adicionales contra Colombia y, además, recortando y suspendiendo proyectos de ayuda humanitaria, poniendo sus prejuicios ideológicos y manipulaciones políticas por encima del espíritu contractual”.
Finalmente, la embajada china denunció una “prolongada interferencia y sabotaje de Estados Unidos a la cooperación económica y comercial entre China y Colombia” y subrayó que esta ha sido “una de las razones que explican el atraso del nivel de cooperación entre Colombia y China respecto a la cooperación colombo-estadounidense y a las relaciones de otros países de la región con China”. No obstante, reiteró que las relaciones entre China y Colombia, y entre Colombia y Estados Unidos, “pueden complementarse y desarrollarse sin contradicción”.
Esta declaración se produce el mismo día en que delegaciones de China y Estados Unidos se encuentran en Estocolmo en un nuevo ciclo de negociaciones sobre los aranceles recíprocos, y días antes de que expire, el 1 de agosto, el plazo fijado por Donald Trump a numerosos socios comerciales para evitar subidas arancelarias.