España sufre el peor año de incendios forestales del siglo
Con 15 grandes incendios todavía activos, "es evidente que estamos ante una de las mayores catástrofes medioambientales de los últimos años", indicó.
Publicidad
Publicidad
Publicidad
Publicidad
Los incendios forestales que han asolado a España en las últimas semanas constituyen "una de las mayores catástrofes medioambientales" que ha sufrido el país en años recientes, afirmó el Gobierno, que aprobó este martes una directiva para agilizar recursos para los afectados.
Con 15 grandes incendios todavía activos, "es evidente que estamos ante una de las mayores catástrofes medioambientales de los últimos años", indicó en rueda de prensa tras un consejo de ministros el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska.
"Los daños personales en infraestructuras y en bienes públicos y privados, sin duda alguna, son elevados", continuó el ministro al referirse a los fuegos que han dejado cuatro muertos y más de 350.000 hectáreas quemadas en las últimas semanas.
En diálogo con Mañanas Blu, Marcelino Núñez, experto de AEMET, tranquiliza en cierta medida al afirmar que el episodio más duro "se va controlando, el número de incendios, grandes incendios va disminuyendo o están siendo controlados". Sin embargo, advierte que esta "terrible plaga" continuará azotando no solo a los países mediterráneos, sino a nivel global.
La magnitud de los incendios en España en lo que va de 2025 ha superado todas las expectativas negativas, incluso las del nefasto 2022. Marcelino Núñez confirma sin rodeos que este año ha sido significativamente peor que cualquier otro en lo que va de siglo. "Este ha sido un año bastante peor, desgraciadamente. Creíamos que el 2022 fue fue el tope. Tuvimos una temporada malísima con muchísimas estallas quemadas, con muchos grandes incendios, pero todo eso se ha quedado un poco atrás con esta este año".
La causa principal de esta escalada es, según Núñez, la intensidad y duración de las olas de calor que han afectado a la península. "Hemos tenido una ola de calor muy importante, la más intensa registrada nunca, la tercera o la cuarta en cuanto a longitud de número de días y esto ha preparado el combustible, ha hecho que que los incendios sean pues prácticamente pues imparable en su primer momento". En particular, una ola de calor que se extendió por 16 o 17 días fue fundamental en la "generación simultánea de muchísimos incendios en el noroeste de la península ibérica".
El experto de AEMET detalló cómo una serie de eventos climáticos desfavorables se han concatenado para crear las condiciones perfectas para la propagación de estos destructivos incendios forestales. "Se ha dado un poco pues como cuando pasan las grandes catástrofes varias cosas a la vez, ¿no?", explicó Núñez.
La secuencia comenzó con una primavera inusualmente lluviosa que "generó mucho pasto, generó un crecimiento, bueno, no digamos anormal, pero sí un crecimiento pues abundante de vegetación, eh, sobre todo el pastizal". Posteriormente, la primera ola de calor del verano, en junio, fue "muy intensa y que provocó un gran estrés en la en todo en todo el combustible, en todas las maderas, en todos los bosques de de la península". Esta ola de calor inicial dejó el bosque "un tanto tocado".
Escuche aquí la entrevista:
Publicidad