
Familia veló por error a la persona equivocada: quedaron impactados con lo que pasó
Esta revelación dejó atónitos a sus seres queridos, quienes desde julio de 2021 vivían con la incertidumbre sobre el paradero de la joven.

Publicidad
Publicidad
Publicidad
Publicidad
La pérdida de Shanice Crews parecía haber llegado a su fin cuando su familia la despidió en un emotivo funeral, luego de años sin saber de su paradero. Sin embargo, meses después, la historia dio un vuelco impactante: Crews estaba viva.
En noviembre de 2024, una desconocida se puso en contacto con la familia y les envió una fotografía reciente de Shanice participando como voluntaria en un evento. La imagen confirmaba lo impensable: la mujer que habían dado por muerta, cremado y llorado durante meses, seguía con vida.
Publicidad
Esta revelación dejó atónitos a sus seres queridos, quienes desde julio de 2021 vivían con la incertidumbre sobre el paradero de la joven madre de dos hijos, desaparecida en Nueva York. Durante casi tres años, no tuvieron noticias de ella, hasta que en abril de 2024 la policía les informó que se habían encontrado restos humanos, supuestamente pertenecientes a Shanice.
El informe forense atribuyó la causa de muerte a una sobredosis de cocaína. Debido al avanzado estado de descomposición del cuerpo, la familia no pudo hacer un reconocimiento visual, por lo que confiaron en la versión oficial, aceptaron los restos, organizaron un funeral y procedieron a cremar el cuerpo. Incluso conservaron sus cenizas en collares conmemorativos, algunas de las cuales mezclaron con las de su madre fallecida.
Tras la aparición de la fotografía, la hermana de Shanice, Shanita Hopkins, contactó nuevamente a la policía para exigir explicaciones. No obstante, las autoridades reafirmaron su postura: insistieron en que la joven había fallecido.
Publicidad
“Nos mintieron”, sentenció Hopkins, visiblemente afectada. “No se pueden borrar esos momentos. No podemos recuperar esas lágrimas ni ese dolor”.
Ante lo ocurrido, la familia rechazó una oferta de reembolso por parte de la oficina forense, que intentó cubrir los gastos del funeral y la cremación. En lugar de ello, han decidido iniciar acciones legales, asegurando que la identificación errónea podría deberse al afán de cerrar rápidamente un caso de persona desaparecida.