Investigan feminicidio de una joven de 24 años; su exnovio confesó el crimen en una carta
El presunto agresor había dejado abiertas las cuatro hornallas de la cocina, en un aparente intento de manipular la escena del crimen.
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El feminicidio de Érica Almirón Romero, una joven de 24 años que fue hallada sin vida en su apartamento en la madrugada del lunes 28 de julio, estremeció a Resistencia, en la provincia argentina de Chaco. Su exnovio, Joaquín Alfredo Pérez, de 29 años, dejó una carta en la que confesaba el crimen antes de intentar escapar rumbo a Paraguay. Las autoridades lo detuvieron horas después en la provincia de Corrientes.
Según información preliminar, la Policía recibió una llamada cerca de la medianoche del domingo alertando sobre una mujer desvanecida en un apartamento ubicado sobre la calle Fortín Alvarado al 91. Al llegar al lugar, encontraron a Érica sin signos vitales, tendida sobre la cama y en un ambiente cargado por el fuerte olor a gas, ya que el presunto agresor había dejado abiertas las cuatro hornallas de la cocina, en un aparente intento de manipular la escena del crimen.
De acuerdo con las primeras investigaciones, la víctima fue asfixiada con una media. Su teléfono celular no fue hallado en el lugar, lo que apunta a una posible intención del agresor de borrar evidencias. Además, el cuerpo presentaba señales de defensa, ya que el acusado tenía rasguños en los brazos, según constató un médico forense tras su detención.
Érica había terminado la relación con Joaquín Pérez luego de tres años y, poco tiempo después, habría iniciado una nueva relación. Esta situación, según medios locales, habría provocado los celos y la furia del exnovio, quien finalmente la asesinó.
El crimen salió a la luz cuando los padres del agresor hallaron una escalofriante nota en su vivienda: “Maté a Érica, lo siento mamá”, decía el mensaje. Al leerla, los familiares alertaron de inmediato a las autoridades, quienes activaron un operativo de búsqueda. La Policía logró interceptar un autobús en el paraje San Borgita, a unos 30 kilómetros de Posadas, en jurisdicción de Ituzaingó, donde Pérez fue arrestado sin oponer resistencia. Se dirigía a Misiones con la aparente intención de cruzar la frontera hacia Paraguay.
La fiscal del caso, María Noel Benítez, aseguró que no hay otros sospechosos en la investigación y que existen indicios de que la escena fue manipulada por el agresor. “Todo indica que el femicida intentó simular un accidente”, afirmó.