Mujer denuncia que tras ir a una cita médica quedó ciega: "Cortes de gato"
La mujer denunció que en el mismo consultorio y con una aguja afilida, la doctora le “hizo cortes en forma de gato en las córneas de ambos ojos”.
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Según el relato de Marián, una joven de 25 años que estudia en la Universidad Nacional Autónoma de México, su actual discapacidad visual adquirida es consecuencia directa de una presunta negligencia médica cometida por una doctora de Médica Sur.
Marián relató a través de sus redes sociales que sus problemas oculares comenzaron en octubre de 2023, cuando notó enrojecimiento y visión borrosa. Tras tratamientos fallidos con médicos generales, una doctora de su facultad le recomendó acudir a un oftalmólogo. Ella y su familia optaron por ir a Médica Sur, guiados por la buena reputación del hospital, pensando que contaban “con doctores que son profesionales, que saben lo que hacen”.
A principios de noviembre de 2023, Marián tuvo su primera consulta con una doctora. En esa cita, la médica fue informada en “repetidas ocasiones” de que Marián padece diabetes desde los 16 años, una condición que, según se reveló posteriormente, era una “total contraindicación” para el procedimiento que se le realizaría.
Inicialmente, la doctora diagnosticó heridas en las córneas de ambos ojos y prescribió un tratamiento con gotas y lentes de contacto terapéuticos. Marián asegura que las cosas mejoraban: “Yo me sentía mejor, empezaba a recobrar mi vista normal”, y estaba contenta porque volvió a “ver, a distinguir lo que estaba escrito”.
Sin embargo, en una consulta de seguimiento, la doctora revisó a Marián y determinó que las heridas estaban cerrando “muy lento”. Para supuestamente acelerar el crecimiento del epitelio, la doctora utilizó una explicación en la que comparó el procedimiento con “cuando tienes una herida con una costra y esa sigue sensible, pero pues tú te quitas la costra y esa herida se cierra más rápido”. Acto seguido, en el mismo consultorio y con una aguja afilida, la doctora le “hizo cortes en forma de gato en las córneas de ambos ojos”.
De inmediato, Marián le comentó a la doctora que veía “nebuloso, solo sombras, que prácticamente no veía nada”. La médica le aseguró “que no me preocupara, que en tres días, una semana, todo iba a estar como si nada, ya mejor”.
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En los días siguientes, los síntomas empeoraron drásticamente, llegando a presentar los ojos “extremadamente rojos, irritados, llorosos” y un dolor que calificó como “insoportable”. Al regresar de emergencia, la doctora sugirió que se trataba de una infección. Días después, un segundo doctor determinó que la situación era “bastante grave” y que parecía una infección micótica.
Marián mencionó que, ante la gravedad del caso, la doctora le comentó que “tal vez sería mejor que me atendieran en otro lado”. Esa fue la última vez que tuvo contacto con ella. Según Marián, esos cortes desencadenaron infecciones bacterianas en su ojo izquierdo que tardaron casi cinco meses en ceder, además de provocar desprendimiento de retina, inflamación de la mácula y una catarata.
Los doctores que la atendieron posteriormente coincidieron en que lo ocurrido no fue un accidente, sino “una total negligencia que me rayaran las córneas”. Marián denuncia que no existe un procedimiento médico que implique realizar este tipo de cortes, especialmente en un consultorio no estéril y con conocimiento previo de su enfermedad de base.