“No es fácil tener encima una AK-47”: sacerdote sobre represión de Daniel Ortega contra la Iglesia

La relación entre el gobierno de Daniel Ortega y la Iglesia está completamente rota. El mandatario tomó la decisión de empezar a detener sacerdotes y cerrar templos para que no se pueda tomar la eucaristía.“Estoy en Estados Unidos y logré llegar acá gracias a Dios (…) En nuestro país pensamos en qué hacer y ahora la dictadura se volvió cruel, el credo de ellos repite todo. Si tú estás a favor de la verdad es que no estás con ellos, esa es la actitud que tienen los de la izquierda. Los mejores defensores de derechos humanos son ellos cuando no están en el poder, pero cuando lo están son los más violadores”, narró el padre Rafael Bermúdez para Mañanas Blu quien se encuentra en exilio.El sacerdote asegura que en Nicaragua vivió “muchas agresiones” y dejó de tener paz, pues las golpizas se volvieron habituales. Es por eso, que la única forma que encontró para seguir y luchar por su pueblo fue salir del mismo. Bermúdez estuvo en una correccional cuando llegó a Estados Unidos, pero le da gracias a Dios por seguir en “la lucha”.“El cuerpo tiene las manos amarradas. No es fácil tener encima una AK-47. Tengo conocimiento que somos seis exiliados y en la cárcel de allá hay tres, los silenciados cada día aumentan más (…) Han utilizado a la Iglesia para fingir una fe y proclamar su voluntad. Ellos dicen que son un gobierno de paz y eso no es así. Han utilizado el nombre de Dios”, añadió.Bermúdez agradece a Dios la oportunidad que le dio de empezar de nuevo, a pesar de estar lejos de su casa y la gente que ama. En Nicaragua vivió un infierno y ahora en Estados Unidos podrá seguir en la lucha de los derechos humanos de su país.