Operación para sacar a María Corina Machado descartó paso por Colombia: ¿por qué?
El agente que ayudó a la fuga aseguró que esta ha sido la misión “más dura que ha tenido que adelantar por el nivel de exposición de María Corina Machado”, debido a que se encontraba en territorio venezolano.
María Corina Machado desde el balcón del Gran Hotel de Oslo
La ceremonia del Premio Nobel de Paz, celebrada recientemente en Oslo, estuvo marcada por la presencia de la líder opositora venezolana María Corina Machado, cuyo arribo a Noruega se produjo tras una compleja y arriesgada operación de extracción desde Venezuela, coordinada por un grupo de contratistas privados conformado por veteranos militares.
La misión fue liderada por Brian Stern, fundador de una organización con 25 años de experiencia en rescates en zonas de alto riesgo como Afganistán y Ucrania, que ha logrado evacuar a más de 8.400 personas. Stern aseguró que esta ha sido la misión “más dura que ha tenido que adelantar por el nivel de exposición de María Corina Machado”, debido a que se encontraba en territorio venezolano, era ampliamente reconocida y estaba siendo perseguida por el régimen.
Según reveló el propio Stern en entrevistas con medios internacionales, el operativo fue financiado con recursos privados y donaciones. Aunque la organización no tiene vínculos formales con el gobierno de Estados Unidos, sí mantuvo comunicaciones no oficiales con autoridades de ese país, a quienes compartieron mensajes y fotografías para confirmar la identidad de la dirigente opositora.
María Corina Machado y Nicolás Maduro
Foto: AFP
En entrevista con Sala de Prensa Blu, Juan Camilo Merlano, periodista deNoticias Caracol, explicó que la operación comenzó en un suburbio de Caracas. En la primera fase, de carácter terrestre, el equipo tuvo que evadir cerca de diez alcabalas o retenes militares hasta llegar a la costa de la península de Paraguaná, en el estado Falcón. Para evitar ser identificada, Machado fue disfrazada y utilizó una peluca durante todo el trayecto.
El tramo marítimo fue el más crítico de la misión. El plan inicial contemplaba zarpar a las 5:00 de la mañana en una pequeña embarcación pesquera tipo esquife; sin embargo, las condiciones climáticas adversas y fallas mecánicas obligaron a retrasar la salida hasta después del mediodía. Durante la travesía, la lancha enfrentó un fuerte oleaje de hasta tres metros, lo que provocó la caída del GPS al mar y la pérdida de contacto con el equipo de rescate que aguardaba en altamar.
El encuentro con el grupo liderado por Stern se produjo cerca de la medianoche, tras más de seis horas de espera. En ese momento, Machado logró identificarse a gritos: “¡Soy yo, María, soy yo, soy yo!”. Al abordarla, Stern relató que la opositora estaba “cansada, asustada, estaba totalmente mojada”, y subrayó la peligrosidad de la misión al afirmar: “Esto no fue un Uber, esto esto fue una operación de alto riesgo para todos nosotros”.
Sobre un eventual retorno a Venezuela, Stern aseguró que “recomendó volver” al país, señalando que aún “hay mucho trabajo por hacer”. El equipo descartó la ruta por la frontera con Colombia, al considerar que el presidente Gustavo Petro no recibiría a Machado “con los brazos abiertos”.