El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ya ha asegurado que su país prepara ataques por tierra en medio de su despliegue militar en aguas del Caribe cercanas a Venezuela, una presencia que la nación suramericana ha señalado en la Corte Penal Internacional (CPI) como una amenaza contra su soberanía.
Días anteriores, durante una reunión en la Casa Blanca, Trump insistió en que "muy pronto" comenzarán los ataques contra carteles del narcotráfico dentro del territorio venezolano, lo que se enmarcaría en la operación Lanza del Sur, que hasta ahora ha destruido a una veintena de embarcaciones en el Caribe y el Pacífico, dejando, según EE.UU., más de 80 personas muertas.
En las últimas horas, en una entrevista con el medio El Político, aseguró que el presidente de Venezuela, "
type="text/html" data-cms-ai="0">Nicolás Maduro, "tiene los día contados". En ese mismo sentido, al ser preguntado por una eventual intervención terrestre en Venezuela, el mandatario respondió.
Periodista: "¿Puede descartar una invasión terrestre estadounidense...?"
Trump: "No quiero...".
Además, dijo que el objetivo sobre Venezuela es: "Bueno, un objetivo es que el pueblo venezolano sea bien tratado. Quiero que el pueblo venezolano, muchos de los cuales viven en Estados Unidos, sea respetado".
Conversación con Maduro
Hay que decir que los mandatarios conversaron recientemente vía telefónica, en medio de las tensiones por el despliegue militar de este país en el Caribe y la crisis de la conectividad aérea en la nación petrolera, lo que no impidió la llegada de migrantes en un avión procedente de suelo estadounidense durante la jornada.
Según Maduro, la Casa Blanca se contactó con el palacio presidencial de Miraflores, sede del Gobierno venezolano, en Caracas, hace "unos diez días aproximadamente", lo que sería el domingo 23 de noviembre, aunque no especificó la fecha.
Si bien no dio detalles de lo discutido, el líder del chavismo aseguró que la conversación fue "cordial" y se desarrolló "en un tono de respeto", por lo que dijo esperar que esto represente un paso "hacia un diálogo respetuoso" entre ambos países, sin relaciones diplomáticas desde 2019.