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La Contraloría General de la República encendió las alarmas y abrió un proceso de responsabilidad fiscal en contra de varios funcionarios que presuntamente serían los responsables de la posible pérdida de los diseños para el proyecto de navegabilidad del río Magdalena.
Los estudios fueron encargados originalmente a Navelena, extinta filial de Odebrecht, y fueron recibidos a satisfacción por Cormagdalena en el año 2014. Sin embargo, tras el estallido del escándalo de corrupción de sobornos de Odebrecht en la región, Navelena terminó liquidada y el proyecto en veremos.
Cormagdalena ha tratado de adjudicar dos veces el proyecto y en ambas ha pedido a los posibles contratistas la realización de nuevos diseños a pesar de que, según la Contraloría, los diseños de Navelena tienen una vida útil de 30 años.
“De la revisión adelantada a la contratación de este informe, se evidencia que presuntamente los estudios y diseños a nivel de detalle pagados a Navelana con ocasión de la APP 001 de 2014 no han sido utilizados, toda vez que las dos licitaciones no culminaron en adjudicación y dentro de su estructuración incluyen una etapa de prefactibilidad que conllevaría el pago de unos nuevos estudios, por lo que se configuraría un posible daño por este concepto”, dijo la Contraloría.
El proceso de responsabilidad fiscal incluye a Navelena (en liquidación) y a todos los exdirectores de Cormagdalena que estuvieron en la entidad entre 2017 y 2022.
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