Una operación adelantada por la Fuerza Pública en el departamento del Cauca permitió desarticular una de las principales capacidades ofensivas del frente Jaime Martínez, estructura de las disidencias que delinque en esta zona del país.
Según confirmó el general Henry Bello, comandante de la Región de Policía número 4, se logró la desactivación de cuatro vehículos cargados con explosivos de alto poder, así como la destrucción de una bodega clandestina utilizada para almacenar material explosivo destinado a ataques mediante drones.
“Como resultado de esta acción operacional, se logró desactivar cuatro vehículos que estaban acondicionados con explosivos de alto poder, artefactos explosivos improvisados. Se logra la destrucción de una bodega que servía como almacenamiento de explosivos para la utilización de drones contra la Fuerza Pública y la población civil de los municipios de Buenos Aires, Suárez, Morales y Cajibío”, señaló el general Bello.
Las autoridades explicaron que estos artefactos eran preparados para ser utilizados tanto en vehículos como en motocicletas, una modalidad recurrente de este grupo armado criminal para ejecutar atentados en el departamento. En el operativo, además, se logró la incautación de más de 1.500 kilogramos de explosivos de alto poder, material que representaba una amenaza directa para uniformados y comunidades civiles.
Entre los elementos incautados se encuentran cuatro vehículos adaptados como carros bomba, algunos de ellos con antecedentes recientes de ataques. Según el reporte oficial, una volqueta de color amarillo había sido utilizada ocho días antes en un atentado contra la estación de Policía del municipio de Buenos Aires. También fue ubicado un furgón color vinotinto, acondicionado con rampas para el lanzamiento de cilindros explosivos de 40 y 100 libras.
La operación permitió, además, la incautación de una camioneta KIA blanca, equipada con dos cilindros de 100 libras y un sistema de activación por radiofrecuencia, así como un automóvil tipo sedán Chevrolet Spark negro, que contenía cilindros explosivos de 40 libras listos para ser utilizados en acciones terroristas.