En total, según un informe de inteligencia militar conocido por Blu Radio, ya van 233 ataques con drones desde enero de 2024, la mayoría concentrados en los departamentos de Cauca, Nariño, Valle del Cauca, Meta y Putumayo. Según cifras consolidadas por las autoridades, han sido lanzadas más de 659 granadas desde aeronaves no tripuladas, muchas de ellas dirigidas contra unidades militares, estaciones de policía y patrullas en movimiento.
“Son drones comerciales de la marca DJI, los cuales son acondicionados con un sistema que libera la carga no superior a los 1.2 kilogramos y eso les facilita a ellos generar todo tipo de mecanismo y artefacto explosivo que no sobrepasa ese peso, lo acondicionan con metralla, todo conservando las dimensiones y el peso para poderlo volar, aproximar y mediante el uso y el empleo del control remoto, pues poderlo liberar, liberar la carga y así con eso generar las afectaciones”, señaló el general Federico Mejía, comandante de la Tercera División del Ejército a Blu Radio.
¿Quiénes han sido los más afectados?
El informe revela una preocupante cifra de afectaciones. Entre 2024 y 2025, dos civiles han sido asesinados por cuenta de estos ataques y 34 resultaron heridos. La cifra de militares heridos asciende a 94 y la de muertos a seis, mientras que la de heridos de la Policía llegó a 10, con un asesinato. En total, 148 personas han resultado afectadas por estos ataques.
“Ante esta situación se han venido generando toda serie de tipo de controles en relación a la tecnología que se está empleando para poder generar un dominio sobre esos drones, pero ellos ya han venido adquiriendo otro tipo de tecnología como es el empleo de otro tipo de drones que ellos mismos mandan a construir, envían a construir, que no esté dentro de los parámetros de control de estas armas que están siendo utilizadas para poder inhibir y controlar el empleo de los drones”, agregó el general Mejía.
Distribución de ataques con drones por divisiones militares:
La Tercera División del Ejército, en el sur del país, concentra el 85 % de los ataques con 196, mientras que las demás divisiones han reportado cifras menores, pero preocupantes: la Segunda División ha tenido 15 eventos y la Cuarta División 6. El fenómeno tiene epicentro en el suroccidente colombiano, una región clave por la presencia de grupos armados organizados como las disidencias de las Farc.
“Así las cosas, pues cada vez que aparece un nuevo dron de una marca diferente o construidos por ellos o mandados a construir, pues toca generar una actualización de los sistemas que se están empleando para inhibir los drones para poderlos nuevamente colocar al día. Así que esto es de una tirilla floja en torno a la construcción y actualización de los sistemas para poderlos estar inhibiendo de manera permanente de eso”, indicó el general Federico Mejía.
En lo que va de este año se han registrado 113 ataques (solo del 1 de enero al 15 de julio), dejando seis militares asesinados y una patrullera de la policía. En la última semana, entre el 9 y el 15 de julio, se han registrado al menos cuatro ataques con drones cargados de explosivos:
- 11 de julio en el departamento del Cauca: Dos ataques en Santander de Quilichao. El primero, sin víctimas, y el segundo, que dejó como saldo la muerte de la patrullera Maryory Ramos y dos policías heridos.
- 13 de julio en Suárez, Cauca: Las disidencias de las Farc lanzaron un dron explosivo contra tropas del Batallón de Operaciones Terrestres, provocando la muerte de un soldado y heridas en siete más.
- 13 de julio en el Catatumbo, Norte de Santander: Un dron fue utilizado en una operación hostil contra tropas del Batallón 11 en El Tarra, dejando a dos soldados heridos.