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Mientras la fuerza pública intenta reforzar la seguridad en Norte de Santander donde en las últimas horas se han presentado varios hechos violentos, entre ellos el homicidio de tres policías, continúan los combates contra el ELN.
El más reciente ocurrió en la vereda El Dave, de Cúcuta, donde al menos dos pelotones, con apoyo del helicóptero Arpía de la Fuerza Aérea, se enfrentaron a miembros de esa guerrilla que, al parecer, planeaban un atentado contra la fuerza pública.
Y es que en el sitio encontraron una moto con explosivos y tres tatucos o rampas de lanzamiento con sus respectivas municiones, similares a las usadas en el ataque que en marzo pasado dejó nueve soldados muertos en Tibú.
Mientras el grupo Marte de la Segunda División del Ejército logró destruir los explosivos, fueron capturados en flagrancia dos personas y ya puestas a disposición de la Fiscalía.
Estos hechos se suman además a la confirmación del secuestro por parte del ELN de una sargento segundo y sus dos hijos menores de edad. La situación habría ocurrido el pasado lunes festivo en horas de la noche, cuando la sargento segundo Ghislaine Karina Ramírez y sus dos hijos, de seis y ocho años, uno de ellos con una condición especial de autismo, viajaban en un carro particular desde Fortul hacia Arauca.
El pronunciamiento señala al grupo Domingo Laín Sáenz del frente de guerra oriental, que los habría interceptado en la vía. Cabe señalar que las tres personas también son familia de un oficial de la Fuerza de Tarea Quirón, de la Octava División.
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“Una vez se tiene conocimiento del hecho, de manera inmediata se dio aviso a las autoridades competentes y en un trabajo interinstitucional se adelantan las acciones respectivas para la liberación de los secuestrados y se instaurarán las denuncias respectivas ante los organismos nacionales e internacionales”, informó el Ejército.
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