En un megaoperativo articulado entre el Ejército Nacional, la Fiscalía General de la Nación y la Administración de Control de Drogas, DEA, ubicaron un artefacto explosivo en un tramo del oleoducto en zona rural del municipio de San Andrés de Tumaco, Nariño. Los operativos que permitieron este hallazgo fueron articulados por el ente investigador con la Fuerza de Tarea Conjunta Hércules.
El explosivo pesaba un kilo y contaba con un detonador no eléctrico con una mecha de seguridad de fabricación extranjera. En la investigación también se encontró una caleta de 40 kilos de afto, una barra de explosivo aluminizado, dos detonadores y 250 minas antipersonales, material que es considerado de "alta peligrosidad" y más que estuvo a la intemperie, que de haber detonado pudo generar un gran daño.
Sobre este operativo, el director del CTI de la Fiscalía, Alberto Acevedo, informó que dicho material pertenecería a la columna Urías Rendón de las disidencias de las Farc. "Es considerado de alta peligrosidad por estar en la intemperie (...) La evidencia técnica recaudada permite advertir que los explosivos serían utilizados para cometer atentados contra la infraestructura petrolera en el sur del país, instalaciones militares y el aeropuerto La Florida de Tumaco (Nariño).”
Un fiscal adscrito al Cuerpo Técnico de Investigación, CTI, legalizó ante un juez con función de control de garantías en Nariño el decomiso de ese material bélico que fue posteriormente destruido
Este es el informe de la Fiscalía por el operativo
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