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La historia de Juan Ángel, un joven que vivió el horror de las 'terapias de conversión'

Avanza en el Congreso de la República el proyecto que busca que las terapias de conversión sean prohibidas en Colombia.

Bandera LGBTI
Blu Radio - EFE
ROBIN UTRECHT/AFP

Dichas terapias se usan con el fin de "cambiar a las personas gays, lesbianas o bisexuales a heterosexuales". Según los defensores de esta iniciativa, estas prácticas resultan ser bastante dañinas para la salud mental de las personas. Por lo que este proyecto apunta a prohibirlas completamente. La representante Carolina Botero apunta a impulsar esta iniciativa. "Son torturas, tratos crueles, inhumanos, que buscan corregir la conducta sexual o la identidad de las personas en espacios médicos, psicológicos o espirituales. Algunas personas se han desinformado usando discursos de fe, pero lo cierto es que muchas iglesias apoyan este proyecto", aseguró.

Blu Radio conoció la historia de Juan Ángel, un joven que sufrió el horror a raíz de estas prácticas.

“Me sometí a violencia psicológica, una violencia psicológica bastante fuerte, donde básicamente te convencen de que tu sexualidad es la culpable de todo lo que te pasa a tu alrededor. O sea, tú eres gay y pues porque tú eres gay tus papás son alcohólicos o porque tú eres gay tus papás son violentos o porque tú eres gay tu papá no te quiere o cosas así” afirma.

Además, contó cómo fue su experiencia dentro de estas reuniones “tuve la oportunidad de ir a varios congresos de este colectivo religioso, donde básicamente llevaban a muchas personas con esta supuesta enfermedad, los llevaban a retiros espirituales fuera de Bogotá, donde básicamente eran fines de semana o semanas enteras literalmente rezando, estando únicamente con personas de la iglesia”.

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También señaló que no solo sufrió maltrato psicológico, “en estos espacios yo me sometí a violencia, además de violencia psicológica, padecí de acoso sexual por parte de frailes”.

Lo anterior se le suma a que sus padres se vieron manipulados por personas que se dejaron inculcar creencias religiosas, lo cual al momento de “salir del closet” los padres de Juan vieron la oportunidad de someterlo a estos retiros para cambiar su identidad.

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“Conocí a muchas personas de todo el país que padecieron lo mismo” relata que conoció a otro joven que también atravesó por esta situación, pero que desafortunadamente decidió quitarse la vida ante la presión por la que estaba viviendo.

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