El ELN después de haberse reunido con el Gobierno en Caracas, para hablar sobre la posibilidad de reiniciar los diálogos de paz, anunció un paro armado en los ríos San Juan, Sipí y Cajón, en el departamento del Chocó. Las comunidades de esas zonas estarían confinadas por esta situación, según reveló la Iglesia católica.
"La situación de las comunidades del San Juan ya es una preocupación constante, es una tristeza que nuestras comunidades no puedan moverse libremente por el territorio, es una tristeza que nuestros liderazgos sean coaccionados y limitados para ellos poder movilizarse en los territorios y hacer sus labore", señaló Yeison Mosquera, líder en el Chocó y coordinador de la Guardia Cimarrona.
En el mismo sentido, Mosquera le hizo un llamado al Gobierno para retomar los diálogos, pero advirtiendo que las negociaciones deben garantizar la protección de las comunidades.
"Le hacemos un llamado al ELN a que sea claro y que sea coherente con las comunidades; las comunidades no pueden estar en abandono y amenaza latente frente a estas acciones delincuenciales que los grupos armados cometen dentro de los territorios", dijo Mosquera.
La Iglesia católica también se pronunció sobre el tema, advirtiendo que al menos 45.000 personas podrían estar confinadas debido al paro armado. Además, hay comunidades en el departamento que también se enfrentan a algunos riesgos por la ola invernal.
"La agudización de la crisis humanitaria en el Chocó preocupa profundamente a la Iglesia católica . A la fuerte ola invernal que enfrenta por estos días el departamento y que estaría afectando a cerca de 200.000 habitantes en 27 de los 31 municipios, se suma el nuevo paro armado anunciado por el ELN el pasado 9 de noviembre, que ya tendría confinadas a más de 45.000 personas" señaló la Conferencia Episcopal de Colombia.
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