El ministro de Defensa, Pedro Sánchez, calificó como un acto demencial el ataque del que fueron víctimas dos soldados profesionales en zona rural de Villagarzón, Putumayo, a quienes intentaron quemar vivos al rociarles gasolina y prenderles fuego luego de una operación contra laboratorios de coca. Otro militar resultó herido tras intentar ayudar a sus compañeros.
“Es una infamia, es un ataque demencial que no lo cometieron unos campesinos o unas comunidades que dicen defender sus derechos, no. (...) Eso que lo perdone Dios, pero aquí la justicia no lo va a perdonar, no lo podemos permitir. Quien ataque a un militar o a un policía, ataca a un Estado, ataca a la institución”, aseveró Sánchez.
Justamente, ambos soldados fueron trasladados este jueves desde Florencia, Caquetá, hasta el Hospital Militar Central de Bogotá.
Sebastián Díaz Amaya está en la Unidad de Cuidados Intensivos en estado crítico y Daniel Fierro Rubiano, quien resultó herido tras intentar auxiliar a sus compañeros, fue valorado por el servicio de cirugía general y plástica.
El subteniente Miguel Ángel Mejía Gutiérrez, otro de los atacados, permanece hospitalizado en la clínica Medilaser de Florencia, Caquetá.
De acuerdo con la denuncia que han hecho entidades como la Defensoría del Pueblo, detrás de esta asonada estarían las disidencias denominadas 'Comandos de Frontera' que a su vez hacen parte de la Coordinadora Nacional Ejército Bolivariano, hoy en conversaciones con el Gobierno.
Ante esto, el ministro Sánchez, detalló que no habrá ningún beneficio jurídico y “se alejan más de alguna opción de que pudieran tener algún beneficio jurídico. Quien ataca a la población está inmerso en crímenes de lesa humanidad”.
El general Erick Rodríguez, segundo comandante del Ejército, enfatizó en que el ataque contra los soldados del Batallón de Infantería # 25 es un intento de homicidio.
“Sin equivocación, la persona que lo hizo buscaba asesinarlos, pero de la manera más cruel posible. (...) Hemos estado al lado de sus padres, de los padres de nuestro soldado y de nuestro subteniente, y para ellos toda la fortaleza y todo el acompañamiento del Ejército”, agregó Rodríguez.
En esa medida, ya iniciaron las medidas judiciales contra los responsables.
“Tenemos identificadas las personas que estaban en el lugar y las personas que perpetraron el hecho. Y por los dos autores, el señor ministro de la Defensa Nacional ha ofrecido una recompensa hasta de $200 millones para lograr su ubicación que conduzca a la captura de los mismos y poder llevarlos a estrados judiciales”, puntualizó.