Palmor, el corregimiento que lleva 50 años sin dónde botar las basuras
Los niños no tienen dónde jugar porque el único parque del corregimiento está lleno de basura.
Publicidad
Publicidad
Publicidad
Publicidad
La misión humanitaria de la Defensoría del Pueblo visitó la Sierra Nevada de Santa Marta para verificar la situación de derechos humanos, seguridad y medio ambiente.
Precisamente, este último elemento es el que más preocupa a los habitantes de Palmor, el primer corregimiento al que llegó la misión y en donde no hay tratamiento para las aguas residuales ni para las basuras.
"La solución es mandarnos un carro acá y que se lleven la basura hacia el botadero de basura de Ciénaga, esa es una solución muy fácil, pero aquí no ha habido poder humano que haga eso", le dijo a Blu Radio César Duarte, un caficultor que se une a la voz de auxilio de los habitantes de esta zona del país, que en su mayoría llegaron de Tolima, el Eje Cafetero y Boyacá huyendo de la violencia en los años 70's.
El único parque que tienen se llenó de basura y no hay ni siquiera dónde sentarse. Los niños se quedaron sin juegos, pues tampoco hay canchas para hacer deporte.
"Por ejemplo, el parque de aquí, le decimos nosotros el parque de la basura porque mantiene lleno de basura. Los niños aquí no tienen dónde ir a jugar", aseguró Fernando Hernández un habitante de Palmor.
Así mismo, Jaider Pedroza líder ambiental del corregimiento explica que se deben tomar acciones urgentes porque ya se están quedando hasta sin agua.
"El principal motivo por el que me empezó a preocupar este tema ambiental, es que cerca de Palmor hay una laguna que se está secando, y esa laguna alimenta a casi todo el corregimiento. Allí es donde se está tirando la basura", dijo a Blu Radio el líder ambiental de 18 de edad que sueña con reforestar las reservas cercanas y tener un centro de acopio en Palmor que mejore las condiciones de vida de los habitantes.
Publicidad
El corregimiento queda a dos horas y media de Santa Marta por carretera, en un terreno árido y montañoso en el que urge mejorar las vías de acceso, sobre todo para los caficultores quienes son los que se ven más afectados cuando hay temporada invernal y tienen que utilizar mulas para bajar el café, pues aseguran que en vehículos se vuelve imposible.
Publicidad