Las zonas grises que preocupan en la política de seguridad y defensa que propone el gobierno Petro

Mientras miles de colombianos viven en zozobra por cuenta de la arremetida violenta de las disidencias de las Farc, del Clan del Golfo y del ELN, hoy el ministro de Defensa, Iván Velásquez, presentará la política de seguridad y defensa del gobierno del presidente Gustavo Petro.Esa hoja de ruta es clave para entender cómo busca el gobierno frenar los avances de la criminalidad, algo que justamente busca garantizando la presencia de la fuerza pública en todo el territorio nacional.En líneas generales, la política de seguridad busca garantizar la vida, la integridad personal, el patrimonio de los colombianos y busca también ampliar la defensa del medio ambiente, garantizar la soberanía y la independencia, también pretende potenciar el talento humano de las Fuerzas Armadas, así como hacer un aporte a la política de paz total.Por supuesto la lucha antidrogas está contemplada en la política de seguridad del Presidente Petro, con un cambio de enfoque, fundamentalmente pensando en erradicación de hoja de coca pero por medio de una sustitución productiva, con el fortalecimiento de la interdicción, de hecho con una ambiciosa meta de incautar en este año 832 toneladas de cocaína.En principio habrá una meta de erradicación forzosa de 28 mil hectáreas de hoja de coca en 2023, pero complementado con el trabajo de erradicación voluntaria del PNIS, que tiene un billón 600 mil millones de pesos para pagarles a los campesinos para que dejen de sembrar coca.La política de seguridad no tiene en principio un capítulo muy detallado sobre cómo garantizar la seguridad ciudadana, sobre todo en lucha contra hurtos, riñas y extorsiones.Al final, queda una gran preocupación por las zonas grises que quedan planteadas frente a la actuación de la fuerza pública para proteger a la población civil de las acciones de grupos armados que estén en medio de una negociación política, porque al final la respuesta ante los criminales quedará en manos de una instancia que no depende de las Fuerzas Armadas, incluso corriendo el riesgo de quedar en la impunidad, por ejemplo, las disidencias de 'Iván Mordisco', que hoy se pavonea por Caquetá como si no fuera un criminal, han cometido 190 acciones violatorias del supuesto cese al fuego bilateral.Escuche a Ricardo Ospina: