La Colombia rota en pedazos que dejó más de medio siglo de conflicto armado fue recuperada por la Comisión para el Esclarecimiento de la Verdad, la Convivencia y la No Repetición, que a lo largo de más de tres años juntó esos fragmentos para elaborar el doloroso informe que presentará este martes al país.Este organismo hace parte del Sistema Integral para la Paz, que incluye además la Unidad para la Búsqueda de Personas dadas por Desaparecidas (UBPD) y la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP), y comenzó su ardua tarea el 29 de noviembre de 2018 con el objetivo de entregar un informe sobre el conflicto tres años después, el 28 de noviembre del año pasado.Sin embargo, en octubre pasado la Corte Constitucional prolongó por siete meses el mandato de la Comisión de la Verdad como lo habían demandado víctimas del conflicto que advirtieron sobre las limitaciones que impuso la pandemia de la covid-19 y la emergencia sanitaria ordenada por el Gobierno para enfrentarla.El informeEn el acto de noviembre de 2018 con el que comenzaron las actividades de la Comisión, su presidente, el sacerdote jesuita Francisco de Roux, expresó: "Aquí, nos iguala, compromete y honra, el compromiso de responder (...) con el clamor de millones de colombianos que, en el territorio y el exilio, piden la verdad de lo que les pasó en el conflicto, de lo que nos pasó como sociedad".Ese día recordó que el informe que presentarán tiene el mandato de esclarecer y promover el reconocimiento de prácticas y hechos en particular masivos que constituyen graves violaciones a los derechos humanos, así como de establecer responsabilidades colectivas del Estado, sus Gobiernos y poderes públicos; las instituciones y organizaciones, y los actores armados que tomaron parte en el conflicto.El médico español Carlos Beristain, uno de los comisionados de la verdad, aseguró en una entrevista con Efe que el informe que será presentado tiene dos partes.La primera es el proceso que ha hecho la Comisión durante su mandato: "Llevamos tres años y medio prácticamente en un ejercicio de escucha en muchas partes del país, también en esa Colombia fuera de Colombia, pues en 24 países hemos estado tomando testimonio"."Ese informe va a contar cuál ha sido ese proceso que hemos aprendido también en el camino sobre esta reconstrucción de la verdad. La Comisión ha hecho más de 500 iniciativas de diálogo social por todo el país, por el mundo, hemos hecho actos de reconocimiento de responsabilidad también diferentes tanto de exmiembros de las FARC como de miembros del Ejército y paramilitares", señaló.La segunda cara es el trabajo de investigación, reflejado en los 10 tomos que serán presentados el martes al país y a la comunidad internacional."Tiene una parte histórica, tiene una parte que se centra en las violaciones de derechos humanos -tenemos que dar cuenta de los 13 puntos del mandato de la Comisión-. Hay otro aparte que cuenta los impactos que todo eso ha dejado en la sociedad, en las víctimas, qué consecuencias ha traído la guerra, qué fracturas también sociales y políticas se han dado en el país", detalló.Igualmente señaló que el informe recoge problemáticas específicas de los grupos étnicos, de las mujeres y del colectivo LGBTIQ+, así como de la niñez y los exiliados."El informe de la Comisión, en un país en el que se ha escrito tanto y se ha investigado tanto, trata de dar cuenta de ese ejercicio de escucha y trata de recoger esa diversidad de experiencias, esos trocitos de verdad que habitan en tantas historias que la Comisión ha escuchado y trata de hacer una visión incluyente", valoró.Los comisionadosEl acuerdo de paz que firmaron en noviembre de 2016 el Gobierno y la entonces guerrilla de las FARC dice que, para cumplir su labor, este organismo está conformado por 11 comisionados: De Roux, Beristain, Lucía González, Alejandra Miller, Ángela Salazar, Patricia Tobón, Marta Ruiz, Alejandro Valencia, Saúl Franco, Alfredo Molano y Carlos Guillermo Ospina.Sin embargo, la comisionada Salazar, quien se destacó por ser defensora de los derechos de las mujeres, de los trabajadores bananeros y de las empleadas del hogar, falleció por covid-19 el 7 de agosto de 2020.En su reemplazo fue nombrado Leyner Palacios, uno de los líderes sociales más reconocidos de Colombia y quien representa a víctimas del municipio de Bojayá (oeste), que sufrió una de las más cruentas masacres del conflicto armado el 2 de mayo de 2022 en la que murieron al menos 86 personas en un ataque de las FARC.El comisionado Molano, uno de los principales investigadores de la violencia y el conflicto armado en el campo, también falleció el 31 de octubre de 2019 de un paro cardiaco a consecuencia del cáncer.En su reemplazó nombraron en abril de 2020 a Alejandro Castillejo Cuéllar, un académico de la Universidad Nacional que es especialista en desarrollo y paz.No obstante, la Comisión de la Verdad no terminó su mandato con todos sus integrantes porque el mayor retirado del Ejército Carlos Guillermo Ospina renunció el mes pasado al considerar que estaba siendo víctima de "estigmatización" por la visión que tiene del conflicto armado."Ya no hay espacio para mí porque en la Comisión de la Verdad hay un señalamiento, una estigmatización, sobre mi persona", expresó Ospina en una entrevista tras presentar su renuncia a De Roux.Las afirmaciones del mayor retirado recogen algunas críticas que ha recibido la Comisión de la Verdad por parte de sectores que consideran que no han sido escuchados por este organismo.Pese a ello, miles de personas, tanto víctimas como victimarios y terceros, acudieron a la Comisión con la esperanza de que sus aportes fueran de utilidad para la publicación de un informe que recoge los pedazos de una Colombia rota que se quiere ver en el espejo para no repetir la violencia del pasado.Le puede interesar: escuche el podcast El Consultorio
Tras la tragedia en El Espinal, Tolima, en la que murieron 4 personas tras desplomarse varios palcos de una improvisada plaza de toros, crecen las voces que piden prohíbir las corralejas. Vea la noticia en Noticias Caracol.
Este lunes 27 de junio, en Bla Bla Blu, con Mauricio Quintero, contamos con la participación de Juan Ricardo Salcedo, un hombre que utiliza la comida chatarra para hacer prótesis.Además, el actor belga Christophe De Geest, habló sobre su carrera.Escuche programa completo:
Estaba en una correría de evangelización en algunos lugares del departamento de Córdoba. Llegué a Pueblo Nuevo y como una muestra de aprecio me invitaron a una finca en la que habían preparado una pequeña corraleja para mí.Algunos manteros de la zona estarían en el corral mostrando sus habilidades. Me contaron que así, nacieron estas fiestas tan importantes para estos conglomerados humanos. Dice el antropólogo Santiago Sembrano, que la primera corraleja conocida, se celebró en Sincelejo en honor a San Francisco de Asís, el patrono de esa ciudad, y que fue en octubre de 1845.Siempre se celebra como una oportunidad de diversión y festejo, en un espacio cerrado por cercas de guaduas y madera, se suelta un toro bravo y algunos mantearos realizan las mejores piruetas posibles, mientras evitan que esto los en vista, en medio del jolgorio y del alicoramiento. También se lanza una multitud al ruedo y arranca esta liturgia de emociones trepidantes de sangre, dolor, risas y músicas.Recuerdo el porro, el arranca teta, de Aníbal monterrosa, en el que se le canta a la fiesta de ese animal con cuernos. El toro era de ese señor, de Aníbal monterrosa.A mí personalmente no me gustan las corralejas, pero entiendo lo que ellas significan para las prácticas propias de algunos pueblos. No olvidemos que una ley del 2009 declaró patrimonio cultural de la nación la fiesta de corralejas del 20 de enero, en Sincelejo. Jairo Olivero me dice, la tradición se vuelve parte de la manera de ser de una comunidad, se vuelve parte de su idiosincrasia y lo que algunos ojos parecen ser algo no muy grato, para esa porción común es un suceso normal de su acontecer. En este caso particular, más bien de celebrar y de romper la cotidianidad. Todo ello no significa que ciertas cosas sean justificables, pero no se puede juzgar a una sociedad moralmente fuera de su ambiente cultural.Hoy, cuando a partir de la desgracia del Espinal vuelve a estar en el ojo del huracán este tipo de celebraciones, llegó el momento que con sinceridad y firmeza se tomen decisiones. No puede ser que todos los años se tengan noticias tristes desde las corralejas.
El reconocido ambientalista y animalista de Santander, Orlando Beltrán, radicó un derecho de petición en la Alcaldía de Charalá, para que sean suspendidas las tres corridas de toros y la cabalgata que se realizarán del 1 al 4 de julio en el municipio. "Los espectáculos taurinos programados en las ferias de Charalá están violando la normatividad constitucional, ya que la sentencia C-666/10 establece que solo se podrán continuar realizando en cualquier municipio del país siempre y cuando no haya interrupción en su periódica realización. En Charalá en los dos años anteriores, no se realizaron, eso es una causal para prohibirlas y suspender los actos taurinos programados", afirmó Orlando Beltrán a BLU Radio. Desde la Alcaldía de Charalá informaron que se evalúa la solicitud realizada por la Asociación Defensora de Animales de Santander (ADA).