En poder de la Fiscalía General de la Nación quedó Jair Álvarez, exmiembro de la Armada Nacional y quien habría facilitado la salida de estupefacientes por Urabá hacia Estados Unidos y Centroamérica.
El hombre fue capturado con fines de extradición por investigadores del CTI en Turbo. Álvarez es solicitado por una Corte del Distrito Medio del Estado de La Florida que lo pide para que responda por los cargos de concierto para delinquir y tráfico de drogas ilícitas.
Según la información preliminar compartida por las autoridades, este hombre conocía en detalle la localización de las unidades en altamar y sus intenciones operativas.
"Esta información, presuntamente, era entregada a los cabecillas de las redes narcotraficantes al servicio del Clan del Golfo, que escogía en el momento exacto para programar el envío de las lanchas cargadas con cocaína", explicó el director del Cuerpo Técnico de Investigación, Alberto Acevedo.
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Según la información recogida, Álvarez se desempeñó hasta finales de 2022 como técnico electromecánico civil en la Estación de Guardacostas de Urabá y, al parecer, en el ejercicio de ese cargo se dedicó a perfilar y contactar a funcionarios de la Armada Nacional para que ubicaran dispositivos electrónicos en las embarcaciones.
Con este mecanismo lograba conocer los movimientos de los barcos en altamar y así podía traficar el estupefaciente.
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