En medio de gestiones por parte de las mismas directivas y el acompañamiento del Ministerio de Educación para mitigar el complejo panorama financiero que afronta la Universidad de Antioquia, cuyo déficit ronda los 350.000 millones de pesos, el Gobierno nacional anunció nuevas medidas.
Precisamente a través de una resolución expedida por el Ministerio de Educación se inició el proceso de vigilancia especial a la institución de educación pública más importante del departamento.
La determinación de las autoridades se deriva un informe técnico presentado el pasado 30 de diciembre producto de dos visitas a la institución llevadas a cabo en 2024 para solicitar documentos y soportes de su gestión administrativa y financiera.
Como resultados del informe, se lee en la resolución, se determinó “una alta dependencia de las cuentas por cobrar, lo que indica que esta debe gestionar su cartera con el objetivo garantizar los recursos para el cubrimiento de sus obligaciones de corto plazo”.
A partir de este panorama que se ha visto reflejado en varios momentos en los últimos meses con retrasos en pagos a docentes y la no renovación de algunos de sus contratos, así como a otros administrativos, el Ministerio adoptó principalmente dos medidas.
La primera de ellas fue ordenar la elaboración e implementación de un plan de mejoramiento, previa presentación al Ministerio de Educación Nacional, el cual estará encaminado a superar en el menor tiempo posible las situaciones de irregularidad y anormalidad.
También se definió la designación de un inspector con presencia en la Universidad para que vigile permanentemente la gestión administrativa o financiera de la entidad, así como los aspectos que están afectando las condiciones de continuidad y calidad que motivaron la medida.
La resolución también establece que el Ministerio podrá adoptar posteriormente nuevas disposiciones dependiendo del nivel de cumplimiento demostrado del plan a ejecutar.