Un trágico hecho sucedió el pasado viernes 15 de agosto en la ciudad de Bogotá, y es que las autoridades confirmaron que un habitante de calle habría perdido la vida tras recibir una fuerte descarga eléctrica cuando intentaba robar cableado alojado dentro de una caja de alto voltaje ubicada en la calle 17 con carrera 30.
Descarga eléctrica le quitó la vida
De acuerdo con el primer reporte de las autoridades, la víctima ingresó a la estructura para buscar la manera de sacar cables y posteriormente venderlos. Sin embargo, durante la manipulación de estos, recibió una fuerte descarga eléctrica, la cual habría sido el motivo por el que perdió la vida de forma inmediata.
Al lugar llegaron equipos de emergencia, así como técnicos especializados, quienes rápidamente acordonaron el área para evitar mayores riesgos a los habitantes del sector y realizar las investigaciones pertinentes en la estructura eléctrica.
El cuerpo del hombre fue trasladado a Medicina Legal, en donde se realizan los respectivos procesos de identificación, pues hasta el momento no se ha dado a conocer su nombre.
Vecinos alertan por robos de cableado
De acuerdo con información compartida por algunos vecinos y comerciantes, este tipo de hechos resultan ser más comunes de lo esperado. De hecho, revelaron que hace poco menos de un mes, otro habitante de calle habría perdido la vida por circunstancias similares.
“Hace como veinte días encontraron a otro hombre muerto, también intentando robar cables. Es un peligro, pero lo siguen haciendo”, comentó un vendedor informal de la zona.
Si bien, para algunos esta es una manera rápida de conseguir dinero, para la ciudadanía es un problema realmente preocupante. Además de las pérdidas económicas, el robo de cableado expone a los individuos que lo manipulan y genera interrupciones en los servicios.
¿Por qué aumentan los robos de cableado?
El interés por extraer estos cables se debe, en la mayoría de los casos, al precio del cobre, mismo que ha subido en el mercado internacional. De acuerdo con la DIAN, entre 2020 y 2023 las exportaciones de este material aumentaron un 65 %, aunque Colombia no sea como tal un país productor de este metal.
Resulta que no solo representa un problema para las empresas eléctricas, sino que además, los delincuentes terminan afectando la fibra óptica, lo que interrumpe la conectividad en hogares y empresas.
Ante este problema, ETB fue enfática con su llamado a la ciudadanía para que denuncien al 123 cualquier actividad sospechosa en la que se vea corte o manipulación de cables, como una manera de prevenir y proteger la infraestructura de estos servicios.