La explosión registrada en la tarde de este jueves en el edificio de sociología de la Universidad Nacional de Bogotá sigue generando conmoción. Aunque las autoridades confirmaron que una persona resultó herida al manipular un artefacto explosivo, son los relatos de los testigos los que permiten dimensionar el miedo y la confusión que vivieron cientos de personas dentro del campus.
“Yo estaba a 30 metros de la explosión. Estábamos ahí cuando pasó, ahí fue donde todo ocurrió (...). A un muchacho se le explotó la papa bomba en la mano y, al parecer, dicen que la perdió”, relató una de las estudiantes que presenció el hecho.
Según su testimonio, en ese lugar había al menos tres personas cuando estalló el artefacto, lo que dejó como saldo varios heridos y serios daños en la infraestructura. Vidrios rotos y puertas averiadas fueron parte de la escena que describió la joven.
“Nos preocupamos mucho por los que estaban adentro, la reacción fue inmediata. Todos corrimos a ver qué había pasado y luego llegó la ambulancia, más o menos cinco minutos después. Ahí empezaron a desalojar a la gente”, agregó.
Casi dos horas después de la emergencia, la Rectoría y la Vicerrectoría de la Universidad Nacional emitieron un comunicado en el que confirmaron que, tras disturbios iniciados a las 4:00 de la tarde en la portería de la calle 26, alguien resultó herido hacia las 6:00 de la tarde al manipular material explosivo en el parqueadero del edificio de sociología. El documento rechazó las acciones violentas y llamó a no estigmatizar a la comunidad universitaria.
"Estos hechos ya fueron puestos en conocimiento de las autoridades competentes y esperamos que sean materia de investigación. Hacemos un llamado a la sociedad colombiana para no estigmatizar a nuestra comunidad universitaria, ya que los hechos ocurridos corresponden a acciones aisladas que no representan el espíritu académico, crítico y plural de nuestra institución", finaliza el pronunciamiento de la Nacional.