Estas personas nunca deberían consumir semillas de chía: hay contraindicaciones
Aunque son populares por sus beneficios, estas semillas podrían causar efectos graves en algunas personas.
Publicidad
Publicidad
Publicidad
Publicidad
En los últimos años, las semillas de chía se han convertido en uno de los superalimentos más populares entre quienes buscan llevar una alimentación balanceada.
Su alto contenido nutricional, que incluye fibra, omega-3, calcio, magnesio y antioxidantes, las ha posicionado como aliadas para regular el sistema digestivo, cuidar la salud cardiovascular y hasta apoyar la pérdida de peso.
Sin embargo, aunque su consumo moderado puede traer múltiples beneficios, no todas las personas deberían incluirlas en su dieta. Según especialistas en nutrición, este alimento —aparentemente inofensivo— puede provocar efectos adversos en ciertos grupos.
Además de su valor nutricional, las semillas de chía son altamente versátiles. Se pueden consumir crudas o remojadas en yogures, batidos, postres, ensaladas e incluso en preparaciones como panes o la popular agua con limón.
Una de sus principales características es la capacidad de absorber hasta 12 veces su peso en agua, formando un gel que ayuda a mantener la hidratación y promueve una digestión más lenta.
Estas cualidades también se asocian con efectos positivos como la regulación del apetito, la estabilización de los niveles de azúcar en sangre y la mejora del tránsito intestinal. Pero estas mismas propiedades pueden representar un riesgo en ciertas personas.
Aunque en la mayoría de los casos son seguras, hay grupos que deben limitar o eliminar por completo su consumo, según advierten expertos en salud.
Aunque es fácil encontrar recetas e infusiones con semillas de chía en redes sociales o tiendas naturistas, es fundamental recordar que no todo lo natural es inofensivo. Cada organismo es distinto, y lo que resulta beneficioso para unos puede ser riesgoso para otros.