Joven inmigrante dio una lección, que no olvidará jamás, a cliente racista
La mujer se negó a ser atendida en una cafetería de Australia por una trabajadora de color y pidió que “trajeran a una señorita blanca”.
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Josie Ajak es una inmigrante sudanesa que trabaja como barista en una cafetería de Australia. En un momento fue sorprendida por una cliente que se acercó a hacer su pedido y pidió ser atendida por otra persona que no fuera de raza negra.
Además insultó a Josie diciendo que “ella no merecía su tiempo ni su dinero”.
Sin embargo, Josie le respondió con naturalidad y, sin perder su sonrisa, le dijo que no había problema y que esperara un momento. Posteriormente la trabajadora informó a su equipo de trabajo y les dijo que la mujer no sería atendida por racista.
Los funcionarios del local se solidarizaron con Josie y decidieron ignorar a la ofensiva cliente, quien posteriormente al verse ignorada por el personal decidió irse del lugar.
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El local ha recibido miles de llamadas de diferentes clientes australianos luego de que se conociera el lamentable suceso para saludar a las trabajadoras, mandarles un mensaje de apoyo y felicitarlas por su reacción. Además, empezaron a usar camisetas con mensajes antidiscriminatorios con un lema que dice “sin tiempo para el racismo”.
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Josie agradeció en su cuenta de Facebook el apoyo que recibió por parte de las personas y destacó que, “sin importar de que color, género, edad, tamaño o forma, todos merecemos amor y debemos ser tratados de esa manera".
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