Margarita Rosa de Francisco aclara polémica: "No fue un subsidio sino matrícula de honor"
De Francisco explicó que ella cumplió plenamente con los requisitos, ocupando el primer lugar en su semestre.
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Margarita Rosa de Francisco, quien reside actualmente en el sur de la Florida, le salió al paso a la polémica que surgió sobre un supuesto subsidio al pago de uno de sus semestre de filosofía en la Universidad Unad.
En diálogo con Mañanas Blu, Francisco desmintió categóricamente que el beneficio obtenido fuera un subsidio, aclarando que se trató de un reconocimiento por alto desempeño académico.
La polémica, impulsada por declaraciones del concejal Daniel Briceño, se centró en la documentación que indicaba que la estudiante figuraba en la Unad como perteneciente al estrato 3 en 2022. Sin embargo, la filósofa insiste en que el concejal incurrió en una interpretación errónea al equiparar la exención con un subsidio.
Margarita Rosa de Francisco argumentó que su beneficio se derivó de una matrícula de honor, un estímulo educativo otorgado por la institución a estudiantes sobresalientes. La entrevistada citó la Resolución 01141 496 del 8 de agosto de 2023, que especifica el reconocimiento para el periodo académico ordinario 1604 de 2022, haciéndose efectiva la exención en 2023.
De Francisco explicó que ella cumplió plenamente con los requisitos, ocupando el primer lugar en su semestre.
"No fue un un subsidio, sino matrícula de honor y por eso me exoneraron el 100% del valor de la matrícula", puntualizó, añadiendo que esta exoneración se aplica a los tres mejores estudiantes, no solo a ella.
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La exención cubrió un valor de matrícula que ella estimó entre $1.100.000 y $1.300.000 pesos por semestre, dependiendo de los créditos. Al ser consultada sobre si hubiese solicitado el subsidio, la actriz fue enfática sobre su situación personal:
"Uno pedir un subsidio por un millón, me parece, en mi caso, una miserableza y eso es lo máximo que yo he pagado en la universidad abierta".
Aclaró que considerar pedir un subsidio por ese valor como una "miserableza" aplicaba a su caso particular "porque yo tengo con qué pagar esa esa universidad, ¿me entiendes?". Aseguró que nunca aplicó formalmente para ningún subsidio, lo cual hubiera requerido llenar un formulario completo.
Otro punto central de la controversia es por qué la base de datos de la UNAD indicaba que De Francisco pertenecía al estrato 3. Ella relató que la universidad realiza periódicamente evaluaciones o actualizaciones de datos, donde se pregunta por la dirección y el estrato.
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La filósofa reconoció que, en algún momento, pudo haber escrito "estrato 3" en un "acto de rebeldía" frente al sistema de estratificación colombiano.
"Si alguna vez pudo ser que haya por rebelión haya escrito estrato 3, tampoco eso es suficiente para que me den un subsidio, porque para tener un subsidio se necesita hacer una aplicación completa, o sea, llenar unos papeles", defendió.
Añadió que al momento de diligenciar el campo no era consciente de que esto pudiera acarrear una "consecuencia administrativa" o de que las universidades públicas pagaran la matrícula por estrato.
Escuche aquí la entrevista: