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El exgerente de EPM Álvaro Guillermo Rendón, y el alcalde de Medellín, Daniel Quintero, no llegaron a un acuerdo en la audiencia de conciliación en la Procuraduría por la declaratoria del exfuncionario como “insubsistente” para destituirlo del cargo.
El exfuncionario y el mandatario, que en su momento fueron aliados estratégicos, no se vieron las caras pero sí enviaron a sus apoderados a este encuentro virtual citado desde la 1:00 de la tarde por el Ministerio Público para buscar un acuerdo preliminar en este proceso disciplinario de oficio luego de que no se dijera públicamente que se releva del cargo a Rendón "con el ánimo de asegurar la estabilidad administrativa y operativa de la empresa”.
Este proceso fue abierto por la Procuraduría para buscar un acuerdo entre las dos partes sin proseguir en los estrados judiciales. Sin embargo, no se concilió.
Según Julián Quintana, apoderado del exgerente, la defensa buscaba "que se revoque la insubsistencia porque estamos convencidos de que hubo una falsa motivación" y, en consecuencia, que el doctor Álvaro Guillermo Rendón vuelva a su cargo.
Esa era la pretensión de la conciliación, pero como no se dio, esta pretensión se va a solicitar ante lo contencioso, ante los jueces
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La defensa del exgerente interpondrá la demanda de nulidad ante el tribunal contencioso de lo administrativo en busca que no solo se anule la resolución que declaró a Rendón como insubsistente sino que se le reintegre en el cargo como gerente general de EPM.
Además, continúa el proceso penal por la denuncia injuria y calumnia en la Fiscalía y pronto se llamará a conciliación para ver si el alcalde Quintero se retracta públicamente de sus afirmaciones contra el exfuncionario por supuestamente desestabilizar la empresa y servir a terceros.
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