En un vehículo se movilizaban los sicarios que ante la señal de pare de los uniformados adscritos a la Policía de Tránsito de Mutatá, en el Urabá antioqueño, habrían disparado en su contra dejando muerto al patrullero Darwin Lloreda de 37 años, y causando heridas a otro patrullero identificado como Francisco Escobar.
En medio de la reacción, según el comandante de la Policía de Urabá, el Coronel William Alberto Zubieta Pardo, se logró la captura de uno de los supuestos sicarios, quien ya se encuentra a disposición de la justicia, pero se avanza en la búsqueda de los demás implicados, por cuya ubicación ofrecieron una millonaria recompensa.
"Dimos la captura de un sujeto que presuntamente participó de estos hechos, está en este momento en proceso de judicialización y, así mismo, articulados con las diferentes autoridades, ofrecemos una recompensa de hasta 50 millones de pesos a quien de información que conduzca a la captura de estos delincuentes" anunció el comandante de la Policía de Urabá.
El patrullero asesinado, oriundo del departamento de Córdoba, llevaba 15 años al servicio de la institución.
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