Durante 12 horas estuvieron desamparados en una isla solitaria un grupo de cinco migrantes venezolanos, entre ellos un niño de 2 años y una mujer embarazada, quienes pretendian viajar de manera irregular desde el archipiélago de San Andrés hasta Nicaragua, pero fueron víctimas de robo por los mismos ‘coyotes’.
Uno de los migrantes contó que, después de pagar 1.200 dólares por el traslado hacia Centroamérica, los dejaron abandonados en Cayo Pescador, isla ubicada frente a Albuquerque.
"A nosotros nos ofrecieron un viaje que nunca pudo ser completado. Al cayo llegamos por milagro de Dios, porque se apiadaron de que íbamos con una embarazada y un niño, pero lo perdimos todo", dijo.
"Fuimos estafados por 1.200 dólares solo por querer cumplir ese sueño americano que muchos desean (...) para muchos es un sueño, pero para otros lo peor", agregó.
Los cinco migrantes fueron rescatados en una operación humanitaria que realizaron Guardacostas deSan Andrés , quienes advirtieron el riesgo que estos viajeros irregulares siguen corriendo al movilizarse en embarcaciones no permitidas para este tipo de navegación en altamar.
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La Armada Nacional hace énfasis en que para el delito de migración irregular se están utilizando embarcaciones no aptas para la seguridad humana, con motores en mal estado y que no cumplen con normas de marina como la de tener un respaldo para en caso de que se presente cualquier inconveniente en el mar.
Algunas embarcaciones tampoco tienen sistema de navegación propio y llevan combustible a bordo y sin extintores, con lo que se podría presentar un incendio y poner en riesgo la vida.
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Sobre los tripulantes rescatados en las últimas horas, la Armada precisó que fueron trasladados a la Estación de Guardacostas de San Andrés y puestos a disposición de Migración Colombia, mientras que el niño fue atendido por autoridades competentes con el fin de restablecer sus derechos.
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