En el barrio Las Américas del sur de Barranquilla, la pobreza y miseria en la que viven sus habitantes no les permite sino obtener una comida al día y, en muchas ocasiones, lo que sobra será el desayuno del día siguiente. El drama lo vivió el Bus Colombia que llegó a esta zona vulnerable del sur de la ciudad para verificar las necesidades de sus habitantes, que viven en muy malas condiciones de salubridad pública por la falta de servicios públicos, pues por sus condiciones de ubicación no son permanentes.
Pero lo más grave de todo es que muchos menores no van constantemente al colegio, porque sus padres no los pueden llevar todos los días y no tienen transporte para enviarlos al colegio más cercano, tal como lo señala Alberto Ramírez, a quien un ventarrón hace tres días le arrasó su vivienda que comparte con su compañera y un hijo de tres años.
Donald Vasquez, líder juvenil del sector, dice que poco a poco ha llegado la electricidad al barrio y así como se le cayó la casa a Alberto, a muchos se les cae por los fuertes ventarrones que suceden frecuentemente y quedan a la intemperie.
"La mayor preocupación es la falta de alimento a los niños y el acceso a la educación, por eso hacemos un llamado a las autoridades y entidades encargadas del bienestar de los niños que nos ayuden con un comedor comunitario para que los menores puedan al menos tener dos comidas al día, que nos den el alimento es suficiente", asegura Donald Vásquez.
La comunidad aprovechó la presencia del Bus Colombia para pedirles a los líderes políticos que en el próximo proceso electoral contemplen en sus objetivos la solución a esta problemática.