La desaparición de otro dragoneante del Inpec, prendió las alarmas de las autoridades en Jamundí y el Valle del Cauca.
Se trata de Sebastián Camilo Castañeda Ochoa, quien el pasado viernes 14 de abril, en horas de la tarde, salió rumbo al gimnasio donde acostumbra hacer deporte, en el sector del Alfaguara, en Jamundí.
Su mamá, Olga Ochoa, asegura que desde ese momento no sabe nada de él y que su último mensaje al WhatsApp fue a las 2:00 de la tarde.
"Él salió con pinta de gimnasio, acababa de llegar de turnos, nos saludamos en la tarde y desde ese momento tiene el celular apagado", afirmó la madre del dragoneante.
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Afirma, además, que tenía información de que su hijo también tendría una reunión en un local de comidas en Pance, pero nunca pudo confirmar si asistirá o no a esa cita.
Cabe mencionar que hace solo una semana fue secuestrado otro dragoneante del Inpec, identificado como Stivenson López Barrios, quien se encontraba de paseo con su pareja cuando fue abordado por hombres de las Disidencias de las Farc, anque horas después, fue liberado y entregado a las Cruz Roja Internacional.
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Las autoridades catalogan los dos casos como aislados. Sin embargo, desde el sindicato del Inpec reiteran el llamado al gobierno nacional a mejorar las condiciones de seguridad de estos funcionarios, pues afirman que por sus condiciones de pertenecer al Inpec corren peligro dentro y fuera de las cárceles.
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