El estadio Metropolitano de Barranquilla estalló de alegría con el golazo de Jhon Córdoba en el segundo tiempo, cuando la Selección Colombia insistía y buscaba ampliar el marcador contra Bolivia para estar más cerca del Mundial del 2026.
Todo comenzó con un destacado pase filtrado del volante Juan Fernando Quintero, quien reemplazó a James Rodríguez, al delantero del equipo ruso Krasnodar.
En el minuto 74 el atacante controló, se perfiló y sacó un potente remate para vulnerar el arco rival defendido por Carlos Lampe, quien había sido figura en oportunidades anteriores durante el partido para evitar más goles de la tricolor.
El número nueve evidenció en su celebración del gol su desahogo porque por fin se le abrió el arco después de recibir varias críticas en los últimos partidos, pero siempre teniendo el respaldo del entrenador Néstor Lorenzo.
De hecho, después de volverse al poner la camiseta (que le costó la tarjeta amarilla) tras el festejo, la primera persona a la que fue a abrazar fue el argentino.